Kika Silva brindó un momento inolvidable al desfilar en la alfombra roja de la Gala del Festival de Viña del Mar 2025 con una pieza histórica de la moda: el legendario Jungle Dress de Versace, el mismo que Jennifer López inmortalizó en los Grammy del año 2000.
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La modelo y presentadora chilena apostó por la moda circular al lucir este emblemático vestido verde con estampado tropical y un pronunciado escote, recreando uno de los momentos más icónicos en la historia de las alfombras rojas.
Eugenia Lemos, influencer y especialista en moda, destacó el valor de esta decisión. “Ella realmente vive la moda circular, se preocupa de dar segundos usos y esto es un segundo uso del uso. Un traje de Jennifer López, el Jungle Dress, el vestido más googleado como el vestido verde de Jennifer López que usó en los Grammy en los 2000”, comentó Lemos.
Un desafío de talla mundial
Para Kika, llevar este vestido no fue solo un acto de estilo, sino un desafío que tomó meses de preparación. “La idea nació conversando con mi equipo sobre cómo transmitir un mensaje realmente icónico. Dijimos: ‘¿qué es lo más icónico? Versace y JLo’. Y en mi cabeza pensé: lo vamos a lograr”, confesó Silva.
El proceso incluyó una colaboración con la estilista española Beatriz Moreno de la Cova, reconocida por trabajar con celebridades como Úrsula Corberó y Eva Herzigova. Silva viajó a España para ajustar el vestido junto a una modista especializada, asegurando que la pieza vintage se adaptara perfectamente a su figura.
El look se completó con zapatos Aquazzura inspirados en los años 70 y joyas de la marca PdePaola, seleccionadas personalmente por Kika en un showroom en Madrid.
Un vestido que hizo historia
El Jungle Dress no solo marcó un hito en la moda, sino también en la tecnología. Cuando Jennifer López lo lució en los Grammy 2000, el interés global fue tal que las búsquedas masivas por imágenes del vestido colapsaron Google, lo que llevó a la creación de Google Imágenes.
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Hoy, solo existen tres versiones originales de este icónico diseño: una en el Museo de los Grammy, otra en el Museo de Versace y la tercera, la que Kika Silva tuvo el privilegio de lucir en Viña 2025.