Alrededor de 130 mil personas están siendo evacuadas en Los Ángeles, Estados Unidos, producto de los feroces incendios forestales que están devastando a la región. La mayoría de estos focos comenzaron el martes pasado, los cuales fueron potenciados por ráfagas de viento que alcanzaron los 112 kilómetros por hora.
PUBLICIDAD
La potencia de los incendios llegó a tal nivel que este miércoles que era muy complejo combatir las llamas desde el cielo. Más de mil bomberos se han desplegado para combatir los incendios, en particular los fuegos de Palisades quemaron cerca de 11,6 kilómetros cuadrados, según lo informado por DW.
Este mega incendio azotó el barrio donde muchas celebridades tienen su hogar, y el medio de espectáculos The Hollywood Reporter señaló que fueron destruidos los hogares de Billy Crystal, Paris Hilton, Mandy Moore, Eugene Levy, Anna Faris, entre otros. Mientras que otros famosos, tuvieron que ser evacuados.
Entre los chilenos afectados están el cantante de La Ley, Beto Cuevas, y Leonor Varela, quienes hablaron sobre este calvario a través de sus redes sociales.
El relato de Beto Cuevas
El músico publicó un estremecedor relato en una nueva publicación de Instagram, en donde contó que las llamas estaban en los alrededores del hogar de su hijo, Diego. “Hollywood arde esta noche. La noche del 8 de enero de 2025 está cargada de tensión. El aire, pesado y contaminado por el humo de los incendios, irrita los ojos y la garganta”, partió.
“Todo parecía lejano hasta que mi hijo llamó: un nuevo incendio ha surgido en Hollywood Hills, peligrosamente cerca de su casa. Ahora, la amenaza es real. Empacamos lo esencial mientras el sonido de helicópteros y sirenas llena el ambiente. Las calles están llenas de vehículos, y la escena parece sacada de La Guerra de los Mundos, pero esta vez no es ciencia ficción”, escribió el intérprete.
“Aunque el viento no sopla tan fuerte como ayer, las llamas siguen avanzando. La esperanza de no tener que evacuar aún se mantiene, pero la incertidumbre pesa. Hollywood, esta noche, es un recordatorio de nuestra fragilidad ante la fuerza desatada de la naturaleza”, cerró Cuevas.