Tras la demanda por abuso sexual que que interpuso en su contra Rafaella di Girolamo -hija de su expareja Claudia di Girolamo- Crisitán Campos retomó la actuación, recibiendo un gentil espaldarazo de sus colegas del mundo artístico. Esto, luego de haber tenido que abandonar la obra que estaba a punto de estrenar, “Reunión de apoderados”.
Se trata de la película “Perra vida”, que cuenta la historia de personas solteras que encuentran compañía en otros doglovers.
La comedia romántica fue filmada en septiembre del 2023 y será lanzada el 25 de mayo por Prime Video. Según indica el medio Culto de La Tercera, su papel no influye en la trama y pudo ser quitado de la cinta, pero el productor Miguel Ascencio, amigo de Nicolás López (condenado por abuso sexual) y esposo de Paz Bascuñán, pidió que se mantuviera.
Dirigida por Felipe Braun y Gabriela Sobarzo, Campos interpreta un papel secundario, pero para él es igual de importante que un protagónico, debido al contexto judicial que enfrenta, donde su imagen como figura pública y familiar está en entredicho. Valorando que su papel no fuese sacado de la cinta, luego de conocerse la grave acusación.
“Lo pasamos muy bien grabando. Fue un agrado actuar con la Paz y con la María José y, además, dirigido por mi hermano Mercader, Felipe Braun. No suelo hacer comedia, así que fue un lindo aprendizaje. Luego de retirarme de Reunión de apoderados, este estreno es como un consuelo”, contó el actor al citado medio.
De hecho, el mismo medio reveló que días después de hacerse pública la demanda, Campos se retiró de otro proyecto audiovisual. Película “Guerra de verano” dirigida por Alicia Scherson basada en el libro El Tercer Reich, de escritor Roberto Bolaño.
Su relación con Raffaella di Girolamo
Días atrás el actor rompió el silencio en una extensa entrevista con La Tercera, en donde habló sobre la denuncia en su contra.
Señaló que conoce a Raffaella desde los tres años y fue una presencia constante en su vida hasta que se separó de su mamá, cuando la psicóloga tenía alrededor 18 años.
“Hasta ese momento, hasta donde yo entiendo, tuvimos una relación muy buena. Ella me decía “papá”, vivíamos familiarmente con mis hijos y ella y la Claudia”
Pero, cuando se separó de Claudia, empezaron los problemas.
“De ese momento para adelante, Raffaella, de alguna manera, supongo yo por sentido común, se puede sentir desplazada de la relación de paternidad que teníamos antes y empieza a mostrar un carácter un poco más beligerante conmigo y con mi polola. Yo me pongo a pololear y ella es muy hostil con mi polola (Sandra O’Ryan). Era bien incómodo, porque ella era muy invasiva y era difícil para mí pololear, puesto que estaba todo los fines de semana con mis hijos y de pronto llegaba Raffaella y era invasiva con ella”, aseguró el actor.
