El cantante Benito Martínez, conocido como Bad Bunny, se ha ganado su fama con sus canciones, muchas de ellas criticadas, tanto por el contenido de la letra, como por su “poco talento” para la música, por lo que siempre está en el ojo del huracán mediático por la controversia que genera. Lo que sí es cierto es que es una gran empresario que sabe manejar a la perfección el marketing y que también lo ha catapultado.
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Algunas de sus conductas han sido reprochadas por el público en general, pues afirman que la fama le habría consumido su humildad. Como el episodio en el que una fan se le acercó para tomarse una foto a su lado, pero él se molestó y le lanzó el celular al mar el año pasado, hecho que fue durante criticado, incluso muchos artistas le dieron apoyo a la joven, y mientras que él era cancelado.
La presión fue tanta que dijo que se tomaría un año sabático y que cerraría sus redes sociales, aunque no las eliminó, sí borró todas sus imágenes. El más reciente episodio fue que demandó a un fans que grabó todo su concierto y lo subió a Youtube. Muchos lo señalan de divo, pues a pesar de la gran fama y millones de dólares que ha logrado, al parecer, pretende ganar todos los galardones.
Por esto, el año pasado fue captado molesto cuando Adele, la cantante mezzo soprano con un rango vocal de C3 a B5 y con siete Record Guinness, le ganó en la categoría de Mejor Interpretación Vocal de los Premios Grammys. Sin embargo, él ha conquistado a un público, y por eso muchos no pierden la oportunidad de fotografiarse con él cuando están cerca, y esto también incluye a otros artistas y grandes personalidades del mundo, incluso empresarios.
El gran desplante
Este miércoles 8 de mayo se viralizó un video en el que el “Conejo malo” recibió una cucharada de su propia medicina, y nada mas y nada menos que por un adolescente poderoso. El intérprete de “Ojitos lindos” asistió al partido de los Dallas Mavericks el pasado miércoles 7 de mayo, evento deportivo en el que también estuvo el dueño del equipo, el multimillonario Mark Cuban.
Mark, cuando terminó el partido, se acercó a la estrella para pedirle si se podía tomar una foto y, por supuesto, aceptó. Tras captar la imagen, Benito se quedó esperando por Mark, ya que él le preguntó a su hijo Jake, de 14 años, si deseaba también fotografiarse con el cantante, pero el chico sencillamente le hizo una seña: “No”, y siguió adelante, por lo que Bad Bunny bajó la cabeza y se retiró del estadio. Esto bastó para que las redes rápidamente se burlaran del reguetonero.
