Los fanáticos de las películas de acción pronto tendrán un nuevo filme en Netflix para mirar. Y es que la plataforma lanzará este 29 de marzo su nueva propuesta del género: El salario del miedo.
La producción francesa, encabezada por Franck Gastambide, Alban Lenoir, Ana Girardot y Sofiane Zermani, es un remake dirigido por Julien Leclercq de la aclamada película homónima de 1953.
¿Quieres saber de qué trata antes de comenzar a verlo o agregarlo a tu lista para ver después? Sigue leyendo para descubrir cuál es la sinopsis de la nueva cinta de acción del servicio de streaming.
¿De qué va El salario del miedo, la nueva película de acción de Netflix?
La trama de El salario del miedo comienza cuando se incendia un pozo petrolero cerca de un campamento de refugiados en pleno desierto y pone en riesgo las vidas de todos los habitantes.
La petrolera propietaria convoca a una comisión de expertos al lugar y concluyen que solo hay una manera para impedir una terrible desgracia: deben reventar el pozo con nitroglicerina en 24 horas.
La compañía entonces ordena a un equipo especializado de cuatro para que transporten unos 200 kilogramos de explosivos en dos camiones hasta el pozo en menos de 20 horas por una gran suma.
Sin embargo, el camino hacia su destino es hostil. En los 800 km que deben recorrer, el cuarteto tendrá que atravesar por zonas intervenidas por rebeldes armados y cruzar campos minados.
Todo mientras conducen dos camiones cargados de nitroglicerina por un terreno escabroso a contrarreloj. ¿Lograrán llegar a tiempo para explotar el pozo o nadie podrá impedir la catástrofe?
“Una bolsa de gas alimenta las llamas. Para apagarlo, hay que hacerla explotar”, expresa una voz femenina en el tráiler mientras se muestra un abreboca de imágenes de la película de acción.
“Tienen 24 horas para apagarlo”, se escucha decir a un hombre en el final del avance de poco más de un minuto repleto de escenas de explosiones, persecuciones y peleas con armas de fuego.
El salario del miedo se estrena en Netflix este viernes 29 de marzo.
