La segunda jornada del Festival del Huaso de Olmué comenzó con bombos y platillos. Desde la obertura, a cargo del grupo cuequero Maihuén de Los Ángeles el público mostró su emoción y entusiasmo. Enseguida se presentó la icónica diva del pop chileno, Denise Rosenthal, quien desplegó en el escenario su consolidado trabajo y trayectoria, con una presentación que cautivó al público por sus efectos, vestuario y puesta en escena.
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Si bien, el sonido le jugó una mala pasada a la artista, ya que, según reportaron en redes y en el mismo Patagual hubo varios problemas de audio, no fue un impedimento para que el público de Olmué disfrutara y coreara los mejores éxitos de la cantante, tales como “Agua segura”, “Cambio de piel” y “Encadená”.
El show de Denise Rosenthal
Al más puro estilo de Beyoncé, la artista se despidió de su público, pero no sin antes ser reconocida con el característico “Guitarpín”.
Posteriormente llegó el turno de la debutante en la comedia, Monse Jerez, quien se subió al Patagual con evidente nerviosismo, sin embargo, de manera paulatina logró ganarse el cariño y la ovación del público.
Su rutina cargada de sinceridad, feminismo y cotidianeidad conquistó el Patagual, quienes la premiaron entre aplausos y risas, y por supuesto, le valió su merecido Guitarpín. Cabe destacar que la humorista marcó 16 puntos de rating, convirtiéndose en el show más visto en la segunda jornada, y superando incluso al romántico Luciano Pereyra.
Finalmente llegó uno de los momentos más esperados de la noche, el mágico retorno de Glup! con su público. La banda se encuentra en medio de su regreso tras varios años fuera de los escenarios, más no del corazón de los chilenos. Éxitos como “Mi destino”, “Complice eterno” y “Grado 3″ resonaron fuerte en el Patagual.
En medio del show, el mismísimo Miguel Tapia, conocido baterista de Los Prisioneros, acompañó a la banda en el escenario, para interpretar juntos “Estrechez de corazón”.
La banda de los dos mil cautivó, una vez más, a todo un público intergeneracional, que incluso se quedó más allá del show para poder obtener alguna fotografía, firma o fugaz encuentro con los rockstars.