Las inquietudes no parecen acabar para Shakira. Se mudó de Barcelona a Miami en busca de tranquilidad, pero desde finales del año pasado se ha enfrentado al acoso de un hombre que le escribía por la redes sociales y le enviaba regalos a su casa, situada en Miami Beach.
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El presunto acosador fue arrestado e identificado como Daniel John Valtier, de 56 años, oriundo de Texas, informó Univisión, que indicó que el sujeto compareció este martes ante un juez, pero lo que más sorprendió fue lo que dijo durante la audiencia ante las autoridades.
“Ella es mi esposa”, expresó el hombre en la Corte de Miami. El juez le refutó de inmediato y le dijo: “No señor, ella no es su esposa”, reseñó NBC News Miami.
El magistrado manifestó su preocupación por las palabras del hombre: “Tengo algunas preocupaciones reales en este momento, porque este hombre está delirando”, y le impuso una fianza por 50 mil dólares.
El detenido pedía que lo dejaran hablar más, pero el juez lo frenó y por sus palabras, le aumentó la fianza a 100 mil dólares, también le ordenó que deje de enviar regalos a Shakira, además le exigió que no la siga intentando contactar y que se mantenga alejado de ella.
Univisión notificó que además de la fianza de 100 mil dólares por acecho, le colocaron otra de 2.500 mil dólares por contratar un auto con el fin de defraudar.
Regalos para Shakira
La agencia de EFE ya había informado en base a un reporte policial, que el hombre enviaba chocolates y botellas de vino a la casa de Shakira, y le escribía en las redes sociales.
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Daniel John Valtier además escribía en las redes sociales que él tenía una relación amorosa con la artista. Se maneja que incluso viajó desde Texas a Miami para visitar a la colombiana. Lo arrestaron el pasado lunes cuando fue a la casa de la cantautora.
Shakira vive en Miami Beach con sus hijos Milan y Sasha, de 10 y 8 años, respectivamente. Durante su proceso de mudanza, los medios destacaron que ella estaba en busca de una zona tranquila, donde tuviera privacidad. No obstante, la serenidad de su residencia se vio algo alterada por el envío constante de regalos, que según se cree, ella nunca abrió por motivos de seguridad.