Durante el más reciente capítulo de “Gran Hermano”, Constanza y Raimundo protagonizaron una divertida e inesperada escena luego de que el participante tuviera que cumplir una importante misión.
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Todo comenzó cuando Capelli contestó el famoso “teléfono rojo”, en donde la hicieron escoger a dos de sus compañeros para que fueran las personas de servicio durante toda la jornada, entre ellos su expinche y Scarlette Gálvez.
Acto seguido, la bailarina no encontró nada mejor que pedirle a su ahora -supuesto- enemigo que le hiciera un masaje en los hombros.
“¿Dónde está mi crema para que Rai me haga mi masaje? Como en los viejos tiempos”, dijo Cony mientras llamaba al participante.
“Más respeto, que está poleando ahí”, dijo Sebastián tras escuchar los llamados. “No, si son víboras”, respondió Raimundo mientras se acercaba a Constanza para cumplir su labor.
“Yo hubiese escogido a mi pana para hacer las cosas juntos, pero ella siempre con la intención de...”, a lo que Capelli le dijo: “Ya córtala, porque sino te mando a hacer algo peor”.
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¿Recordando viejos tiempos?
Mientras Raimundo se encontraba haciendo el masaje, la bailarina aseguró que “estas son las manos de un Vikingo...¿Qué se siente hacerle un masaje a tu archienemiga?”, le consultó, haciendo pasar por reportera.
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“La verdad es que... sin comentarios”, respondió nervioso Cerda.
Sin embargo, Cony siguió con el interrogatorio:
Constanza: ¿Rai, tú consideras que tienes buenas manos?
Raimundo: Sin duda.
Constanza: ¿Este talento se traspasa en lo íntimo?
Raimundo: Sin duda.
Ante tal respuesta, Constanza solamente atinó a reír con una cara de sorpresa, mientras le agradeció a su compañero por haber hecho un buen trabajo.
