Tras su reingreso a Gran Hermano, Francisco Arenas, más conocido como Papá Lulo, contó a sus compañeros de encierro los motivos que lo llevaron a tatuar sus brazos y colocarse un aro en la oreja.
Según contó, antes del reality no estaba de acuerdo en usar ese tipo de accesorios, pero su mirada cambió tras compartir con jóvenes durante la experiencia televisiva.
“¿Sabes por qué me puse aros? Yo siempre estuve en contra, nunca me gustaron los tatuajes y menos los aros”, contó a Constanza Capelli y Jennifer Galvarini, quienes quedaron sorprendidas con el nuevo look de Panchito.
Papá Lulo contó motivo de su aro
“Incluso, me da vergüenza lo que te voy a decir, pero se los voy a contar”, reveló, reconociendo que trató mal a su hijo por usar aros, pero se arrepintió tiempo después.
“Una vez mi hijo llegó con un palo aquí en la oreja y yo le dije ‘falta que te pongas mini para que parezcas mina’”, le lanzó a su retoño.
Sin embargo, el “Pelao Táctico”, reconoció que fue “desubicado”, por lo tanto se disculpó.
“Lo llamé y le pedí disculpas, porque me di cuenta que había cometido un error”, sinceró.
Tras esto, al salir del encierro por primer vez, vio a un joven usando aros y decidió que era lo que quería hacer.
“Cuando yo me fui de aquí, me fui a los estudios, vi a una persona que andaba con aros y estaba todo oscuro, lo único que se veía era una luz y se le reflejaban las dos cositas brillando aquí. ‘Ese me voy a poner yo’, le digo”, reveló según consignó La Cuarta.