El nuevo capítulo de “Gran Hermano” estuvo marcado por una fuerte polémica, y esta vez tuvo como protagonistas a Mónica y Jennifer, más conocida como la “Pincoya sin glamour”.
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El hecho se dio debido a que a la adulta mayor le molestó una torre de almohadas que hicieron Raimundo, Coni, Pincoya y Fran sobre dos camas, dejándola un tanto “aislada”, ya que normalmente se molesta cuando hablan en la noche.
Esta situación generó la furia de Mónica, quien tras darse cuenta decidió correr a contarles a los participantes de la otra pieza, conocidos como “los guarenes”.
“Para que después no digan que son mentiras mías. Miren chiquillos, a mí no me va a tocar, porque estoy protegida por Jehová”, comentó.
Posteriormente, Raimundo intentó darle una explicación porque Mónica estaba perdiendo los estribos y comentaba que tenía miedo de que ellos le hicieran algo.
Mónica le gritó con todo a la Pincoya
En ese momento, entró Jennifer a la discusión: “Señora Mónica, corte su show conmigo. Le voy a decir una cosa, vaya a cortar su show. Usted me está echando la culpa de que yo estaba conversando, y estaba conversando con las chicas”, le dijo Jennifer.
Visiblemente alterada, la adulta mayor le respondió, señalándole que “estabas en el espejo, como siempre, conversando en la noche a la hora que sea, con las cámaras. Yo no estoy loca, estaba hablando con él (Raimundo), no te metas”.
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“Qué tiene que ver que hable con las cámaras, nadie le está diciendo que usted está loca. Yo no le estoy haciendo machitún. Yo no coloqué las almohadas”,le comentó la chilota, totalmente calmada.
Sin embargo, Mónica ya estaba visiblemente colapsada y comenzó a gritar con todo, hasta llegó toda la gente de la otra habitación.
“No te metas, a mí no me vengas… quédate callada de una vez por todas. Le voy a dar explicaciones a Rai, pero no a ti. Le estoy pidiendo explicación a él y se mete ella. En ningún momento estaban jugando”.
“No señora, no me voy a quedar callada”, cerró Pincoya.
Finalmente, Constanza, Fran y Rai intentaron explicarle que solamente era un juego y que realmente no tenían la intención de hacerle ningún daño.