Arrancó el Wimbledon y Roger Federer tuvo su merecido homenaje por su retiro y por lograr ser una de las máximas estrellas de este deporte al conseguir ocho campeonatos y un sinfín de reconocimientos, junto a él se encontraba Kate Middleton con quien mantiene una estrecha amistad desde hace algunos años.
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La leyenda del deporte blanco es bastante cercano a la realeza por lo que en varias oportunidades se les ha visto compartir y hasta emprender proyectos juntos. Sin embargo, la presencia de ambos en el palco real de Wimbledon ha dado de qué hablar en medio de los saludos, sonrisas y acercamientos que tuvieron, pese a los protocolos reales.
El tenista estuvo acompañado también de su esposa Mirka Federer quien fue captada por las cámaras con rostro molesto pese a que se trataba de un evento dedicado a su pareja. Internautas han apuntado a la princesa de Gales como la gran causante de su malestar y han recordado el día que se dieron un beso.
El beso de Kate Middleton y Roger Federer que rompió el protocolo real
Fue en 2017 Middleton estuvo nuevamente haciéndole porras a su gran amigo quien se preparaba para ganar su octavo título récord de Wimbledon masculino contra el croata Marin Cilic.
Tras conseguir el merecido triunfo Kate y el príncipe William felicitaron al campeón y fue en ese momento en el que la royal se olvidó de las pautas de la monarquía al darle no uno, sino tres veces a Roger.
La misma cuenta oficial de Wimbledon resaltó el gran momento de alegría y emoción de la realeza con el deportista.
“Abrazos, besos y apretones de manos de la realeza y la familia para el campeón de #Wimbledon”, escribieron junto a las postales
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Ahora el momento ha vuelto a ser recordado ante la complicidad que han presumido en el homenaje a Federer, pero sobre todo muchos se han indignado por la actitud de la princesa, pese a que se encontraba la esposa del tenista junto a ellos.
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Sin embargo, se estima que Kate haya decidido felicitarlo de tal manera debido a que Federer es de Suiza, donde es costumbre que los amigos se saludan con tres besos: primero en la mejilla derecha, luego en la izquierda y luego en la derecha nuevamente.
Por su parte, William se limitó a estrecharle su mano como muestra de admiración y respeto.
