El doctor Sebastián Ugarte abrió su corazón y reveló una de las grandes consecuencias que tuvo que enfrentar tras poner fin a su primer matrimonio: el estar alejado de sus tres hijos.
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Según las palabras del profesional a TiempoX, luego de separarse decidió tomar rumbo a Santiago para continuar con sus estudios de especialidad en medicina, lo cual le puso una barrera de 1.000 kilómetros con su familia.
“Las parejas se pueden romper. Si rompen una relación estando casados sin hijos, es como un pololeo, que solo afecta a dos personas adultas, pero cuando hay niños, la cosa es compleja, porque no pueden vivir en dos casas”, sostuvo el doctor.
“Es un precio que tienes que pagar. Tener una separación es mala, tener una separación y estar estudiando, especializándose y con un régimen de estudio exigente, tiene un precio, y todo eso significa menos tiempo para compartir con tus hijos y disfrutar”, aseguró.
Aún conserva algunos recuerdos
Pese a que no estuvo presente en cada momento de la infancia de sus tres retoños, Sebastián Ugarte atesora algunos de estos recuerdos, como un juego que inventó con ellos, dónde él era el tiburón y sus hijos los peces que escapaban.
“Esas cosas que ellos se entretenían, yo también, incluso invitaban a los amigos del barrio, todas esas cosas, se pierden”, relató con nostalgia al medio.
Finalmente, el doctor Ugarte comentó que aprendió varias lecciones en su fallido matrimonio y aseguró que no pretende volver a cometerlos en una nueva posible boda.
“Me faltaba más vida, más experiencia. No es bueno actuar así, lo mejor es que las cosas se vayan dando de forma natural, cuando se tienen que dar”, sentenció el profesional de la salud.
