Paulina de Allende-Salazar, envuelta en la polémica por llamar “paco” al difunto cabo Daniel Palma y que le significó su despido de Mega, ahora le corresponde acudir a declarar por la querella de injurias y calumnias graves con publicidad, interpuesta hace dos años por la entonces alcaldesa de Maipú Cathy Barriga, según informa La Cuarta.
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El caso judical se remonta a 2021, cuando la periodista realizó un reportaje de investigación donde se denunciaban presuntas irregularidades en el pago de horas extras en el mencionado municipio.
Fue la propia ex autoridad municipal quien interpuso la demanda con la comunicadora como principal involucrada. La acción judicial también incide en los entonces conductores del matinal “Mucho Gusto” José Antonio Neme, Diana Bolocco y Roberto Saa, quienes también deberán declarar en calidad de testigos el 17 de abril en dependencias del Octavo Juzgado de Garantía de Santiago.
La querella de Cathy Barriga
Al momento de presentarse la denuncia, la abogada de la ex alcaldesa, Pamela Cisternas, señaló que “producto de este reportaje, señalando de una manera poco prolija y adjudicando malos manejos e incluso fraudes en relación al pago de las horas extraordinarias, es que ha generado una serie de afectaciones a la dignidad de doña Cathy Barriga”.
De acuerdo con lo informado por fuentes judiciales, tras dos años de investigación, el magistrado requiere el testimonio de todos los involucrados, y las declaraciones de Paulina de Allende resultan claves para el proceso.
De esta forma, el próximo lunes comienza la seguidilla de interrogatorios, tanto de la ex periodista de Mega en calidad de acusada por el delito de injurias graves con publicidad como de sus ex colegas del panel- Neme, Bolocco y Saa-, como testigos.
