El actor Rodrigo Soto, quien interpreta al malvado personaje de “Hipólito Cárdenas” en la nocturna de Mega “Hijos del desierto”, reveló este miércoles que buena parte de su interpretación la sacó de Augusto Pinochet y el personaje ficticio de “El Padrino”.
En un live del área dramática del canal privado fue que Soto dio mayores luces respecto de la trama de la teleserie y el rol que cumple su personaje en el desarrollo de la historia.
“Es un tipo muy corrupto, pero también es inteligente y hábil, y sabe perfectamente de dónde viene (...) no es que quiera parecerse a Bormann o Sanfuentes, sino que quiere poder, y aspira a ser validado y reconocido. Se le van presentando situaciones que él puede aprovechar para alcanzar ese objetivo”, contó el actor, quien también se refirió al efecto que producirá en su personaje la reciente muerte del detective Patricio Heim en la novela.
Un papel inspirado en Augusto Pinochet
“Se abre una gran ventana después de esto, en lo que va a ir sucediendo más adelante con respecto al cuartel, los policías y el mismo personaje de Cárdenas. La muerte de Heim sin duda marca un antes y un después para todos en general. A partir de ahí van ocurriendo otros hitos que se van sumando a todo esto (...) marca un precedente importante porque no se mata todos los días a un compañero de trabajo. Él sabe muy bien lo que se le viene, lo bueno y lo malo”, relata.
“Cárdenas va a adquirir cosas grandes. Es un personaje que se adelanta un poco a los demás en el hito principal de la historia, y no queda mucho para eso. Él se dará cuenta de algo muy relevante y eso le va a dar poder, lo que lo ayuda a subir varios escalones. Empieza a codearse desde otro lugar”, prosigue.
Otro de los puntos que tocó el actor en el live fue el trabajo de personificación que realizó para darle la estética y un tono oscuro a “Hipólito Cárdenas”.
“Estéticamente o a nivel físico, de cara, me inspiré en ‘El Padrino’, de Marlon Brando. Me colgué un poquito de ahí. Soy admirador de esa saga, me gusta mucho y la encuentro interesante”, reconoció el actor, quien además tomó aspectos del fallecido general del ejército para sumarle a su personaje.
“A medida que lo fui elaborando, hubo otros personajes de la historia de este país que me sirvieron para armar el personaje (...) hay algo de Augusto Pinochet en su timbre o musicalidad de la voz. Y eso fue dando un habla y un ritmo que también se fue acomodando a medida que grabamos”, prosiguió Soto.
“Tenía ganas de entrar en un lugar actoral que no había hecho antes en teleseries. Quise trabajar desde una maqueta, y a partir de ahí construir algo distinto a lo que había hecho, por ejemplo, en ‘Demente’, ‘Juegos de Poder’ o ‘Perdona nuestros pecados’. Sentía que el cuerpo del actor me iba pidiendo esas cosas, y era una apuesta. A veces te puedes pasar, te puede quedar mal y te matan”, finalizó.