José Antonio Neme se tomó las pantallas de Mega para reflexionar sobre la detención de Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), a quien se le imputan los delitos de hurto de madera, usurpación y atentado contra la autoridad.
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Durante la transmisión de “Mucho Gusto”, el animador comentó que “hay una dimensión política que a mí no me deja de llamar la atención: yo no sé si es torpeza o más que torpeza, ingenuidad política brutal y lo digo del lugar del Ministerio del Interior”.
“Primero, dejemos claro que Héctor Llaitul no es Osama Bin Laden, o sea que no lo fueron a buscar los navy seals a un lugar escondido en Pakistán; estuvo 20 años paseándose por todos los lugares del país. Estaba almorzando en un restaurante, le han hecho entrevistas en televisión, entre ellas mi amiga personal Mónica González. Si los periodistas pueden dar con él... Por favor, terminemos con ese relato de que aquí se encontró un prófugo de la justicia que estaba en la selva colombo-venezolana”, agregó.
Asimismo, afirmó que este hecho es “un relato no resuelto entre el mundo político y el mundo jurídico”.
“Con esto, por favor, no estoy cuestionando el trabajo del Ministerio Público para nada, (...) ni tampoco el trabajo de las policías. Lo que estoy diciendo es que la ciudadanía tiene que tener claro que si el señor Héctor Llaitul -si esto hubiese sido estrictamente jurídico- hace 20 años que estaría preso. No es un aparecido en el delito”, afirmó Neme.
Luego, el animador del matinal explicó que “si Héctor Llaitul no ha sido detenido antes es porque ha habido una dimensión política que ha permitido que él se pasee libremente por este país (...) y haciendo su trabajo como líder de la CAM, ya sea terrorista para algunos, reivindicatorio para otros, cada uno sacará sus propias conclusiones y la justicia tiene su mirada”, dijo.
Los dardos a Gabriel Boric
Posteriormente, José Antonio Neme apuntó sus dichos hacia el Gobierno: “Está siendo sorprendido porque tiene una carga respecto a su propia historia. Yo estoy absolutamente seguro de que si esto hubiese ocurrido hace dos años, en algún momento, con este nivel de cinematografía, el diputado Boric habría salido a pedir la libertad inmediata de Héctor Llaitul. ¡Eso hubiese ocurrido!”, criticó directamente la actitud del mandatario.
“Lo que quiero decir con esto es que llegó el momento de ordenar el relato y reconocer lo que antes se pensaba y lo que hoy día se cree menos. Digamos que tenemos derecho a cambiar de opinión”, concluyó.