El catálago de Netflix se expande constantemente, ofreciendo siempre una amplia gama de producciones para todos los gustos y sabores. Entre todas esas opciones, contamos con uno de esos temas atractivos, que retan a la mente y no te dejan apartar la mirada de la pantalla, como las cintas psicológicas.
Si ese es el estilo de películas que te llaman la atención, aquellas que ponen a prueba toda tu capacidad mental jugando al límite con el espectador, te traemos una recomendación de tres películas de la plataforma de streaming que seguramente te atraparán totalmente.
La mirada invisible
Esta película argentino-francesa-española de 2010 narra “el mundo del Colegio Nacional de Buenos Aires durante los días previos a la guerra de Malvinas en 1982, desde el punto de vista de una preceptora, “una figura gris del engranaje represivo”. María Teresa, persiguiendo un vago, quizá inexistente olor a cigarrillo, comienza a esconderse en los baños de los varones para sorprender a los que fuman y llevarlos ante la autoridad, y poco a poco hace de ello un hábito oscuramente excitante.”
Antes de despertar
Titulada originalmente ‘Before I go to sleep’, esta cinta nos adelanta en la sinopsis: “Christine Lucas es una escritora de cuarenta y siete años que, por causa de un accidente sufrido a los 25, es incapaz de recordar el pasado y de retener los recuerdos después de ese accidente. Cada día, al despertarse, cree que está soltera y que aún tiene que tomar grandes decisiones, pero, como todos los días, descubre que vive con su marido y que las grandes decisiones de su vida ya están tomadas.”
Cuenta con un gran elenco, conformado por Nicole Kidman, Mark Strong, Colin Firth, y Anne-Marie Duff.
Hogar
Por último tenemos esta producción española de thriller y terror, estrenada en 2020. La cinta está protagonizada por Javier Gutiérrez, Mario Casas, Bruna Cusí y Ruth Díaz y nos cuenta la historia: “Javier (Javier Gutiérrez) es un ex-ejecutivo publicitario que, en su día, se hizo rico haciendo anuncios de utensilios de cocina bajo el eslogan “La vida que te mereces”. A día de hoy, sin embargo, su realidad es otra: lleva un año en el paro, le cuesta encontrar trabajo, y ya no puede permitirse el alquiler del lujoso apartamento en el que él y su familia vivían, por lo que han tenido que dejarlo y mudarse a un viejo piso de propiedad que poseían en un barrio mucho más modesto. Cuando Javier descubre que, por algún motivo, aún tiene un juego de llaves perteneciente a su anterior piso, decide infiltrarse en la vida de la familia que ahora lo ocupa - formada por el padre de familia Tomás (Mario Casas), su esposa Lara (Bruna Cusí) y su hija Mónica (Iris Vallés) -, con intención de recuperar su vida anterior de formas cada vez más perversas.”