Patricia Maldonado recordó en su ya habitual programa de streaming “Las indomables” lo mal que le hizo al Jappening con ja la llegada del comediante Ernesto Belloni.
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La mediática, que participó del histórico programa de humor de TVN a comienzos de la década de los ochenta, cuestionó la decisión que a inicios de los noventa tomó Eduardo Ravani, de incorporar a Belloni, conocido por su humor de doble sentido, cuando el espacio humorístico se emitía en Megavisión (Mega).
Después vino una guerra porque Eduardo Ravani llevó a Ernesto Belloni. Era una guerra, que tú no te puedes imaginar, porque ella (Gladys del Río) creía en esos años que Belloni no era apto para el Jappening
— Patricia Maldonado
“Belloni le cambió el pelaje en el buen sentido al Jappening con ja, lo puso en doble sentido, lo puso grosero, en consecuencia que ni Jorge Pedreros ni Fernando Alarcón, ni las actrices que eran la Marilú Cuevas y la Gladys del Río no usaban el doble sentido y no usaban los garabatos”, relató Maldonado.
Un daño a la imagen del Jappening
Según la cantante “el doble sentido que tenía Belloni no era para el Jappening y quedó la cagá”, aún cuando en su caso los creadores del programa le permitieron usar garabatos, aunque ellos eran tapados en la edición del espacio con otros sonidos.
“Cuando yo trabajé en el Jappening, yo usaba el garabato y curiosamente a mi me lo aceptaban, pero lo ponían pito. Lo encontraban gracioso y me aceptaron muchos garabatos”, recordó.
Tan cuestionada fue la participación de Belloni en el espacio, que su permanencia causó graves problemas de relación entre Ravani y Del Río, quienes en palabras de Maldonado nunca tuvieron una “buena relación”.
“Gladys del Río tenía metido en la cabeza que si tú no eras actor de universidad, no eras actor. Craso error, porque el talento no se compra con un título en la universidad, con el talento se nace (...) entonces ahí había una guerra, porque ella consideraba que Eduardo Ravani era un pésimo actor, y después vino una guerra porque Eduardo Ravani llevó a Ernesto Belloni. Era una guerra, que tú no te puedes imaginar, porque ella creía en esos años que Belloni no era apto para el Jappening”, insistió.
“El Japenning era un humor blanco, sin doble sentido (...) entonces lo de Belloni, fue un daño, según mi opinión”, cerró.