La boxeadora Carolina “Krespita” Rodríguez se sentó en los sillones del estelar de Chilevisión, “Podemos Hablar”, en donde se sinceró sobre un complejo momento en su vida personal: la separación con su expareja, Claudio Pardo.
Ella partió contextualizando que él era su entrenador y manager, pero mantenía su relación en reserva hasta que quedó embarazada de su hija Megan. “Yo quería que en Chile respetaran mi carrera deportiva, siempre cuando eres mujer te preguntan más por la relación que de la actividad deportiva", puntualizó.
“Terminó bastante mal la verdad”, partió comentando y reveló que cuando estaba peleando el título mundial, ya estaba insostenible su relación con Claudio, por lo que ni siquiera se preparó debidamente.
“Nuestra relación ya no funcionaba. A mí me hizo bastante mal exponerme mucho en la televisión, que en todos lados me conocieran. La gente me trató siempre con mucho amor, pero el tema es que empiezas a sentir que pierdes tu vida privada”, explicó.
Sin embargo, su pareja no lo experimentó de esa manera. “Para Claudio era al revés, disfrutaba esto de la fama (...) y se empezó a despreocupar de mí. Independiente del tema deportivo, estaba el tema de pareja, y eso me comenzó a colapsar y al final terminamos”, contó.
La abusiva separación
Cuando fue el título del mundo, ellos decidieron terminar su relación, pero su hija fue concebida después de que tuvieron un affaire posterior a su ruptura. “Traté en lo personal de mantener la relación (con él) por mi hija", contó.
“En realidad no había vuelta atrás, yo no me llevaba con él, en temas de valores tampoco. A veces cuando no quería entrenar por X motivo, me trataba mal (...) Me estaba denigrando, siendo él más protagonista que yo de mi carrera deportiva”, continuó.
Los problemas con el padre de su hija comenzaron a escalar. “En 2018, cuando viajé, también tuve limitantes con él. No quería firmar el permiso de mi hija, Megan tenía un año", contó.
“Todo el rato me decía ‘me quieres quitar a mi hija, ¿para qué te la vas a llevar si vas a ir a puro lesear? No vas a hacer nada. Yo te hice campeona, tú no eres nadie'. Él tenía ese discurso todo el rato, del ‘yo te hice’”, reveló Krespita.
“Obviamente, igual yo soy una mujer, independiente de que haga un deporte rudo y fuerte. Uno es mujer igual, soy sensible, fui mamá, también estaba preocupada de mi hija, donde trasnochas y yo quería competir".
Krespita confesó que tuvo otro problema al momento de querer volver a competir, ya que tenía que irse afuera del país y buscar un nuevo entrenador en el extranjero. “Ahí fue otro conflicto de que te dieran persona. Es bastante ser mamá separada, con una relación que no está muy buena, y en donde te limitan tu sueño por un hijo. Al final separé el tema y me dediqué a mi hija”, confesó.
El episodio de violencia
El animador Julio César Rodríguez le preguntó a la boxeadora si es que hubo un momento violento en la relación, y ella reveló que esto sucedió cuando estaban entrenando.
“Me pega un manotazo acá (en la mejilla). Yo lloraba previo a ese combate, yo le pegaba al saco y estaba llorando. Me pega un palmazo acá y le digo 'pucha, porfa, no me pegues más, porque no me vas a enseñar, estamos a una semana de la pelea", contó.
“(Él le dijo) ‘Ay, ¿quién te crees? ¿la campeona? Si te falta por corregir, no lo sabes todo'. Y le dije ‘por favor, no lo hagas’. Y lo vuelve a hacer y yo, de vuelta, le respondo con un puñetazo y ahí ya se acabó todo. Ahí la relación no dio para más“, confesó sobre el fin de su relación.