El nadador chileno Alberto Abarza consiguió este mediodía la primera medalla para la delegación del Team ParaChile en los Juegos Paralímpicos París 2024, luego de obtener la presea de bronce en la competencia de los 100 metros espalda, categoría S2.
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El seleccionado nacional finalizó su histórica actuación con un registro de dos minutos, un segundo y 97 centésimas; crono que solamente fue superado por el ruso Vladimir Danilenko (que compitió como atleta paralímpico neutral), con un tiempo de 2:01:34; y el brasileño Gabriel dos Santos Araujo, ganador de la competencia, con un tiempo de 1:53:67.
La cuarta medalla olímpica para Abarza en los JJOO
Si bien el ritmo de la prueba desde un inicio lo llevó el deportista brasileño, con unas brazadas que resultaron demoledoras para sus oponentes, el chileno mantuvo la concentración para protagonizar con Danilenko una ardua lucha por el segundo puesto, y que finalmente se decantó en favor del euro-asiático por unas escasas centésimas.
Este es la cuarta medalla olímpica que obtiene Abarza, quien en los Juegos de Tokio 2020 ya había ganado un oro y dos platas en las competencias donde participó.
Cabe destacar que esta no es la única competición en la que el nadador chileno puede sumar preseas, puesto que aún le queda participar el próximo sábado en los 50 metros espalda, y el lunes 2 de septiembre en los 200 metros libres.
De seguir sumando preseas en la capital francesa, Abarza seguirá agigantando su leyenda en el deporte paralímpico chileno y mundial, donde aparte de sus cuatro medallas olímpicas suma a su palmarés tres doradas en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, cinco platas en Santiago 2023, y medallas de oro y bronce en el Mundial de para natación en Manchester 2023.
Pese a su histórico registro, y a que en la previa de su competencia era una de las cartas chilenas a preseas, el propio Abarza había indicado en Publimetro que ello no era algo que lo definía en su pasión por el deporte.
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“Una medalla nunca me va a definir como deportista, así sume alguna más o si nunca hubiese tenido una. Esto para mí es deporte”, explicó.
“Lo dije cuando fui a Río, a mis primeros Juegos: iba contento con ser 25º del mundo y me fui de Brasil siendo octavo del mundo. Después, en Tokio, con un oro y dos medallas de plata, seguí pensando lo mismo. Una presea ni la cantidad de ellas jamás me va a definir”, aseguró.
