La pesista chilena María Fernanda Valdés vivió una emocionante jornada este lunes en el gimnasio Chimkowe de Peñalolén, en lo que fue su participación en Santiago 2023. Y aunque a diferencia de lo logrado en los tres últimos Panamericanos, en los que cosechó medallas, esta vez se tuvo que conformar con un noveno lugar.
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La oriunda de Coquimbo, quien ganó oro en Lima 2019 y plata en Toronto 2015 y Guadalajara 2011, llegó a Santiago 2023 con un contexto muy diferente a sus anteriores participaciones panamericanas. Esta vez fue su reaparición después de un receso de dos años, período en el que se recuperó de una lesión de hombro que le impidió particpar en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 y se conviritó en madre, en mayo de 2022.
“Estaba muy bonito, fue emocionante, orgullosa de lo que hemos estado trabajando. Llevamos 10 meses entrenando, volver de un embarazo no es fácil y más por el peso corporal en el que quedé. Ahora estoy en una categoría nueva, yo estaba en 87 kilos, 80 kilos no pesaba desde 2016″, comentó Valdés luego de su presentación en el Chimkowe.
“Vamos súper bien, lo más difícil que teníamos era bajar de peso de los 110 kilos que me dejó el embarazo a los 80 kilos, no es menor lo que bajé y desde enero a la fecha creo que nadie nos tenía fe en ese sentido”, complementó.
Y si bien no ocultó no pena por no obtener una presea, la destacada pesista nacional de 31 años manifestó que “estoy orgullosa de lo que hice, hoy no salió la medalla, pero no significa que no tengamos revancha. La meta final es París y para eso estamos trabajando”.
Desempeñándose en la categoría 81 kilos, María Fernanda Valdés ahora se enfocará en competencias específicas de su disciplina que le permitan obtener un cupo para los Juegos Olímpicos París 2024, en lo que sería su tercera participación en una cita de aquella magnitud, luego de sus actuaciones en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, en las que remató sexta y séptima, respectivamente, compitiendo en la serie 75 kilos.
