Rodrigo Goldberg aprovechó este miércoles su plataforma de comentarista deportivo en el programa “Al aire libre”, de radio Cooperativa, para defenestrar la gestión de Pablo Milad y la ANFP con Conmebol, y que acabó con Chile fuera de la organización del Mundial de 2030.
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A una semana de haberse confirmado que Argentina, Paraguay y Uruguay serán las tres naciones sudamericanas que acogerán algunos partidos del centenario Mundial de 2030, que además fue entregado oficialmente por la FIFA a España, Portugal y Marruecos, el exfutbolista realizó un análisis de la bochornosa posición en que quedó el país tras confirmarse además que la ANFP sólo recibirá una compensación económica por el polémico acuerdo al que llegó la Conmebol con el ente rector del fútbol mundial.
Los descargos de Rodrigo Goldberg
“Hace una semana nos enteramos que nuestros ‘queridos vecinos y socios’ sabían, de antemano, los hechos y razones de este desaire, del cual Chile se enteraría literalmente por la prensa”, aseveró Goldberg, quien en su editorial radial no dudó en afirmar que el fútbol chileno “financió la corruptela desatada” de los dirigentes paraguayos y argentinos, liderados por el presidente de Conmebol, Alejandro Domínguez. Uno que para el exfutbolista nacional “bailaba en redes sociales, pero celebró una derrota humillante para Sudamérica, aceptando las migajas que le dio FIFA”.
“Tres federaciones se arreglaron los bigotes a nuestras espaldas utilizando recursos de un fondo en el cual Chile participó, es decir, nuestro país financió la corruptela desatada donde una vez más aparece Argentina y Paraguay”, insistió el comentarista, dando cuenta de los millonarios fondos que el Estado chileno aportó en su momento a la Corporación que estaba a cargo del proyecto de organización del Mundial 2030.
La evidente molestia de Goldberg apuntó también a los méritos deportivos de Paraguay para acoger un Mundial, considerando que en las últimas décadas ha tenido una paupérrima participación en torneos de la Conmebol.
“No tiene ninguna razón de peso para clasificar directo y menos para gozar del título del país organizador. Paraguay agachó la cabeza y aceptó las migajas de FIFA sin decir ni pío”, reclamó.
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“La palabra traidores les queda muy, pero muy chica, y lo triste es que esto no tiene vuelta, porque con suerte devolverán algo del dinero que Chile depositó, lo cual es menos que un consuelo; pero la imagen con la que quedamos no la limpia nada. Quedamos como los tontos del barrio y los giles del continente”, concluyó.