El desastre que vivió Colo Colo en la segunda parte del partido ante O’Higgins, en Rancagua, dejó en evidencia la fragilidad defensiva de un equipo que se despotenció enormemente en esa zona. Tres de los cuatro titulares que componían la zaga en el título del Campeonato Nacional 2022 no están en este 2023, por diversas razones.

Gabriel Suazo y Óscar Opazo emigraron al Toulouse y a Racing, respectivamente. Hasta el momento, sólo el primero ha sido reemplazado, con la llegada de Erick Wiemberg, mientras que el segundo está siendo sustituido por canteranos.

Sin embargo, la baja más dolorosa en términos defensivos es la de Emiliano Amor. Una lesión lo tendrá fuera por todo este semestre y ya se empieza a extrañar.

En apenas dos fechas del torneo actual, el “Cacique” ya recibió siete goles, dos por parte de Deportes Copiapó y los cinco que anotaron los rancagüinos en el complemento en El Teniente. La cifra contrasta con el certamen anterior, donde los “albos” padecieron solamente 17 tantos en 30 jornadas.

Estos números no son casualidad, ya que desde que el lesionado zaguero argentino arribó al Monumental, su presencia o ausencia equilibra o desequilibra notoriamente la retaguardia. Las estadísticas no mienten.

Por el campeonato local, el ex Vélez Sarsfield ha disputado 42 encuentros, en los cuales el cuadro colocolino sufrió 25 dianas. Es decir, 0,59 por duelo.

Sin el defensor transandino en cancha, entre 2019 y el pasado domingo, el “Popular” ha jugado 22 lances por el evento doméstico, con 25 conversiones. O sea, 1,13 por choque.

Más allá de los números

Las cifras hablan por sí solas, pero también los hechos. Ramiro González todavía no logra ser prenda de garantía en el fondo, no solamente en el Campeonato Nacional, sino, además, en la Copa Chile. De hecho, fue responsable en el gol de Magallanes, donde Felipe Flores le ganó el cabezazo.

Tampoco se ha visto un fiato con Maximiliano Falcón, quien asoma perdido sin Amor a su lado. El uruguayo extraña a su socio de las últimas dos temporadas, necesita a alguien que lo ordene y le cubra las espaldas cuando se manda para adelante.

Ni hablar del lateral derecho, donde Bruno Gutiérrez y Jeyson Rojas no han aprovechado las oportunidades. Este último tuvo responsabilidad en dos de los cinco tantos de O’Higgins.

Con este escenario, Gustavo Quinteros manifestó su necesidad de reforzar la zaga, más que la delantera. Sobre todo si ya está por llegar Darío Lezcano.

“Nunca habíamos recibido esta cantidad de goles, pero podía pasar porque estamos rearmando. Cometimos errores”, lamentó el entrenador. “No marcamos bien y cada vez que llegaban, hacían el gol”, agregó.