Un encuentro físicamente exigente fue el que protagonizaron las selecciones de Japón y Croacia por los octavos de final del Mundial, que tras igualar 1-1 en el tiempo reglamentario y el suplementario debieron recurrir a los penales, donde el vigente subcampeón del mundo se impuso por 3-1 y derrumbó el sueño de los “samuráis azules”.
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El cuadro nipón llegaba a este partido luego de hacer historia en el Grupo E, tras superar por 2-1 a España y asegurar el primer lugar de su zona. Los balcánicos, en tanto, venían de eliminar a Bélgica con un empate sin goles, que no les alcanzó para superar a Marruecos en la tabla.
Los primeros pasajes del encuentro transcurrieron con un leve dominio para los pupilos de Zlatko Dalic, que mantuvieron la posesión de la pelota y se crearon una muy buena llegada en los 8′, con un mano a mano que le ganó el portero Shuichi Gonda a Ivan Perisic.
Con el correr de los minutos, el combinado asiático se fue asentando de mejor manera en el partido, aproximándose al arco de Dominik Livakovic y logró ponerse en ventaja en los 43′, cuando Daizen Maeda capturó un balón suelto en el área para anotar el 1-0.
Daichi Kamada (46′) tuvo el segundo para su equipo en el inicio del complemento, pero envió su disparo sobre el travesaño. Y en los 55′, los europeos armaron una gran jugada colectiva en los metros finales y Dejan Lovren envió el centro para un Perisic que metió la cabeza para igualar el marcador.
Con este tanto, el ex compañero de Alexis Sánchez y Arturo Vidal en el Inter de Milán alcanzó la marca del legendario Davor Suker, máximo goleador de los croatas este tipo de torneos (6).
En los minutos finales se vio un leve dominio de los croatas, que cerraron con una posesión superior al 58%, pero sin la profundidad suficiente para penetrar el cerco propuesto por el técnico Hajime Moriyasu.
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Así, el cotejo se fue a una prórroga donde era patente el cansancio que había en ambos elencos, sobre todo en el representativo del Viejo Continente, que tuvo que reemplazar a dos de sus principales figuras, como son Perisic y Luka Modric. En los 30′ de adición, el marcador no se movió.
En la definición desde los doce pasos, y tal como ocurrió en Rusia 2018 ante Dinamarca, los croatas estuvieron más certeros que su rival y tuvieron a un gigante Dominik Livakovic, quien tapó tres lanzamientos. De dicha forma, el vigente subcampeón del mundo se impuso por 3-1 y sacó pasajes a cuartos de final, donde se medirá ante el ganador de la llave entre Brasil y Corea del Sur.
