En medio de la severa crisis que atraviesa el arbitraje chileno, este miércoles se revelaron unos audios del juez Francisco Gilabert, quien dirigió el recordado duelo entre Huachipato y Copiapó en el CAP por la promoción, en los que quedan al desnudo una serie de irregularidades irregularidades que envolvieron su controvertida decisión de cobrar un penal en favor de los acereros.
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“Cobré el penal entendiendo que podía no ser penal, porque me la jugué y vi desde atrás que lo tocaba en el tobillo. Caché que me iba a llamar el VAR. Listo, me llama el VAR, veo que no es penal, voy a salir con tiro de esquina”, parte expresando Gilabert en los audios revelados por “Los Tenores” de Radio ADN.
“Y me dicen ‘Francisco, un momento, analiza la camiseta’. Veo un jalón de camiseta pero dije ‘me parece una acción de juego, voy con tiro de esquina’. Y me dicen ‘Francisco, por favor, analiza la camiseta’, y yo ‘¿qué?’ y ahí entendí que había algo raro. Y me fui con esa sensación de cobrar una hueá que no era”, continúa.
En su relato, el árbitro de 39 años detalla que “termino el partido y el VAR me dice ‘hueón, menos mal que cobraste el penal, menos mal que entendiste’. Le digo ‘sí, pero qué hueá pasó’”. Y agrega que le dicen: “Llamaron de Santiago, que había que cobrar penal”.
“Fui obligado a cobrar algo y mira ahora la media cagada”
De esa manera, Gilabert confirma lo denunciado hace algunas semanas la revista Tribuna Andes, respecto a las presiones desde Santaigo para cobrar ese penal en favor de Huachipato. “El VAR violó todos los protocolos”, remarca Gilabert y agrega que “fue un diálogo muy trucho. De seguro van a liberar los audios, ojalá que se vea porque se siente esa hueá. Porque al principio yo tenía listo el tiro de esquina, y me hacen detenerme, ‘Francisco, ve la camiseta’. Y ahí cagó todo”.
Tras ello, el juez FIFA expone sus descargos por todo lo que ocurrió esa tarde del 26 de enero en Talcahuano, cuando Huachipato se impuso por 1-0 sobre Copiapó gracias al tanto de Cris Martínez -tras el controvertido cobro-, con lo que selló su permanencia en Primera División.
“Me siento como ahueonao, como que fui un torpe. De todas formas podría haber hecho algo distinto, quizá me castigaba, hasta me echaba [Castrilli], pero hacía lo que yo realmente creía. No sé qué chucha, quizá no estaba tan conectado con el partido porque muchas veces he dicho que no a los penales. Pero esta vez fue una hueá muy rara, terrible turbio”, manifiesta Gilabert en uno de los audios revelados.
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“He pensado en tantas hueás, que me llevaron porque soy el más nuevo de los FIFA y creerán que ellos me eligieron. Después pensé que los cabros del VAR sabían lo que iba a pasar y lo tenían conversado. He pensado también que [Osvaldo] Talamilla o Castrilli tienen una hueá con la gente de Huachipato, eso creo que es lo más cercano, y ese partido era especial para ellos y no podía perder. He pensado en tantas hueás. Pero verme involucrado en esa mierda fue terrible penca, porque no tuve autonomía, fui obligado a cobrar algo y mira ahora la media cagada”, añade.
Por la misma vía, el árbitro de aquel polémico duelo en el CAP revela que tuvo una cita con Javier Castrilli. “Me llamó Castrilli y me dijo que era un tipo valiente, corajudo, que se sentía representado por mí en la cancha. Bla, bla, bla, puro verso. Le digo ‘pero el que paga aquí soy yo’, y me dice ‘no te preocupes Francisco, te vamos a bancar a muerte, esto es lo que necesitamos, gente comprometida con el proyecto’”, cuenta.
Por último, Francisco Gilabert identifica a Mario Vargas, quality manager en aquel compromiso en Talcahuano, como la primera persona que recibió la presión desde Santiago. “Al QM lo llaman, ‘eso es penal’, y pasó para el otro lado. Así que ahí armé el puzle después”, manifiesta.
