Nissan llegó a las 400 mil unidades producidas desde su Complejo Industrial Resende, que la marca posee en el estado brasileño de Río de Janeiro. Un Kicks bitono se llevó el honor para la fábrica, que abrió sus puertas hace cinco años.
El recinto de la marca japonesa tiene un proceso de producción integral, gracias a inversiones que superan los 2,6 millones de reales. Desde 2014, gracias al March y al motor de combustible flexible de 1,6 litros y 16 válvulas, la producción se ha acelerado desde entonces.
A menos de un año después del comienzo de las operaciones, Nissan comenzó a fabricar el motor de 3 cilindros, 1 litro y 12 válvulas, y el sedán compacto Nissan Versa, en abril de 2015. Dos años después, Resende comenzó a fabricar su exitoso Kicks.
Desde esta planta, la primera de Nissan en Sudamérica, no sólo se cumple con la demanda de los consumidores locales, sino que también se exporta a mercados como Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Panamá, Perú, Paraguay y Uruguay.
Además, Resende ha destacado por el uso de tecnologías para mejorar la vida de los humanos, como los 97 robots y 167 vehículos guiados automatizados que mejoran los tiempos de producción al optimizar los procesos y perfeccionar el manejo de materiales en la línea de ensamblaje.
El hito de las 400 mil unidades producidas en Resende también coincidió con el tren motriz número 400.000 fabricado en la planta, un motor CVT de 4 cilindros.
“Con el doble hito de 400.000 vehículos producidos y motores fabricados, el complejo demuestra tanto su madurez como la experiencia técnica de sus profesionales, que han estado trabajando durante los últimos cinco años siguiendo estrictos estándares de calidad”, aseguró el director senior de Fabricación y Operaciones en Nissan Brasil, Marco Biancolini.