Las vacaciones están en su peak, pero hay muchos que ya están pensando en el retorno a la rutina. Uno de esos aspectos es el escolar, especialmente el del transporte escolar. Por un lado, padres que buscan un buen servicio; al otro, los “tíos” que cotizan un modelo de furgón para renovación o para comenzar en este rubro.
PUBLICIDAD
Para ambos casos, hay una serie de detalles a considerar para elegir el mejor vehículo. Desde Foton-Cidef, marca que tiene en su portafolio varios modelos que apuntan a los escolares, como el FT Crew y el K1 Diésel, dan sus consejos sobre los puntos más importantes.
“Es de gran utilidad para el transportista escolar que quiera ofrecer un servicio diferenciador en su área velar por la seguridad de los niños que transporte. Es clave que, junto con cumplir con las normativas vigentes, sume tecnología para resguardar las vidas de los ocupantes”, asegura el gerente comercial de Foton-Cidef, Richard Valenzuela.
Así, se debe considerar que los vehículos tengan elementos de seguridad activa y pasiva, como frenos ABS con EBD. A eso, para entregar mayor comodidad al conductor y al acompañante, cuando amerite, posean aspectos de equipamiento como radio con conexión USB y aire acondicionado bizonal, como lo tienen algunos modelos de Foton, como el K1 de pasajeros y el FT Crew.
Además, según la Conaset, las exigencias mínimas de un furgón escolar para tener en consideración es que debe poseer Seguro Obligatorio de Accidentes, contar con la revisión técnica al día y el sello correspondiente y estar inscrito en el Registro Nacional de Transporte Escolar (lo que se puede verificar con el número de patente).
Asimismo, como seguridad, un furgón debe tener vidrios transparentes frente a cada fila de asientos, luz de advertencia en la parte trasera del techo o huincha retro reflectante adherida a los costados, cinturón de seguridad en todos los asientos (sólo si es un furgón fabricado en el 2007 o años siguientes) y contar con un adhesivo que indique el número de pasajeros que puede transportar el furgón.
Por el lado del conductor, en tanto, éste debe poseer la licencia profesional clase A1 (antigua) o A3 que lo habilite a transportar escolares, identificarse en una tarjeta con foto y nombre, visible dentro del vehículo, respetar la capacidad de los pasajeros indicada en el certificado de revisión técnica y contar con un acompañante en caso de que se transporten más de cinco niños de prebásica.