No es para paseos, tampoco funcionaría como SUV, aunque está hecho para ser un todoterreno. Y el fabricante ni siquiera es de la industria automotriz.
A todas esas características en contra, la Nasa las pisotea con su nueva joya, el Mars Rover Concept Vehicle B-Roll, un auto con el que la oficina aeronáutica de Estados Unidos espera conquistar Marte en tres años más.
En apenas cinco meses, los ingenieros de la Nasa desarrollaron esta máquina que fue presentada hace un par de días en Cabo Cañaveral y que debería estar en el espacio en 2020.
El Mars Rover tiene 8,5 metros de largo, 4,2 de ancho y 3,3 de alto, pesa más de 2.500 kilos y puede llevar cuatro pasajeros, aunque su gran funcionalidad es de exploración. Para eso, el vehículo incorpora tres ejes con neumáticos sin aire diseñados especialmente para el complejo suelo marciano, mezcla de arena fina con rocas, y que van montados en llantas de 50 pulgadas.
Asimismo, como “equipamiento”, el Mars Rover posee un taladro para recoger muestras de roca, puede analizar sonidos y posee paneles solares para alimentar las baterías de funcionamiento. Para moverse, tiene otra batería dedicada de 700 voltios que pueden dar hasta 112 km/h, aunque la velocidad no es lo primordial. Además, trae un avanzado sistema de navegación y un completo sistema médico.
La Nasa planea que en 2020 ya esté totalmente operativo y la propuesta es enviarlo a Marte en un cohete Atlas V541. Aún no se define dónde aterrizaría, algo que la oficina está estudiando. Por mientras, las ciudades de la costa este de Estados Unidos podrán ver en exhibición este máquina tan futurista como todoterreno.