Ya están disponibles en Chile los semáforos inclusivos. Estos cuentan con cajas botoneras que funcionan con sistema braille, un altavoz que entrega instrucciones y datos geográficos del sector que permite a los usuarios ubicarse de mejor manera en el espacio.
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El proyecto fue posible gracias a la gestión de Bramal, que este año incorporó una botonera que ayudará a personas ciegas, con movilidad reducida y a los adultos mayores.
Luis Bravo, socio fundador de Bramal señala que estos dispositivos “permite indicaciones por medio de voz y sistema braille, que además de avisar los tiempos del semáforo de forma táctil, entrega información de las características de las calles cercanas. Otro punto importante, es que se activa con cualquier parte de una de las extremidades, además están homologadas y validadas por la Unidad Operativa de Control de Tránsito”.
Esto a partir del catastro nacional de la Comisión de Seguridad de Tránsito (Conaset) que señala que en Chile existen más de 4.500 semáforos conectados a los sistemas de control y que en la Región Metropolitana cuenta con más de 3 mil de ellos. Sin embargo, ninguno de estos dispositivos era inclusivo.
Por otro lado, cabe destacar que según el Estudio Nacional de Discapacidad, en Chile hay más de 2.600.000 personas con algún tipo de dificultad para movilizarse, es decir, el 20% de la población., mientras que el 34% de los adultos mayores no alcanza a cruzar las calles con la duración de la luz verde. Esto último según el Instituto Nacional de Geriatría.
La tecnología implementada en los semáforos apunta a mejorar la calidad de vida y la seguridad de los transeúntes.
“Sin duda alguna cuando no están se produce un caos tanto para los conductores y peatones. En ese sentido en Bramal nos preocupamos de la situación país, por lo tanto, nuestras botoneras son simples de mantener, de utilizar y están pensadas para que no sean vandalizadas”, completa Luis Bravo, socio fundador de Bramal.