El maquillaje ha sido fundamental para el cine y la creación de algunos de los personajes más icónicos que han existido, pero por muy realista que sea, lo que le sucedió a la bailarina profesional Jai Fears, no tiene explicación.
Es que la joven estaba participando de una sesión de fotos con motivo de Halloween para la firma «Glam Gore» y le tocó caracterizar a un zombie. Hasta ahí iba todo sin problemas, aunque todo cambió cuando una vez terminada la caracterización sufrió un ataque de pánico.
Fue tan fuerte el ataque, que la gente de la producción decidió llevarla a un recinto hospitalario para ayudarla a superar la crisis, aunque nunca pensaron en todo lo que sucedería después por culpa del maquillaje.
Maquillaje hiperrrealista
Cuando Fears entró a la clínica, los médicos y enfermeras no podían creer lo que veían. El maquillaje era tan realista y cubría su boca lo que le impedía comunicarse, por lo que temieron que en realidad más que una crisis de pánico hubiera sufrido algún otro tipo de ataque.
“Entraron en alerta máxima y dijeron que iban a regresar a la sala de emergencias y que probablemente yo estaba en estado de shock”, contó la bailarina a la cadena de noticias Fox2 de la ciudad de Detroit.
La mujer relató que nadie se dio cuenta que lo que llevaba en el rostro era maquillaje y que ella tampoco dijo nada a los médicos porque pensó que notarían que sus heridas no eran reales.
“Al principio no les dije nada porque simplemente asumí que podían ver que era falso”.
Tras la alerta, finalmente los médicos y funcionarios del recinto hospitalario entendieron que se trataba de un excelente trabajo de maquillaje y continuaron tratado a la bailarina solo por la crisis de pánico.