El vuelo entre Quebec y Toronto no debía superar la hora y media, por lo que Tiffani Adams decidió dormir antes de regresar a su casa, pero por lo que pasó después esa pudo haber sido la peor decisión de su vida.
Es que la mujer despertó sin saber que pasaba, porque las luces de la aeronave estaban apagadas y no había nadie a su alrededor.
La pesadilla que vivió Tiffani, ocurrió el pasado 9 de junio, y se hizo pública luego que Deanna Noel-Dale, amiga de la afectada escribiera un reclamo en el sitio de Facebook de Air Canadá, la aerolínea a cargo del vuelo.
«Me dormí quizás a menos de la mitad de mi vuelo de una hora y media», dice el relato, en el que además cuenta que se despertó varias horas después del aterrizaje del avión en completa oscuridad y sin posibilidad de abandonar la nave.
La mujer trató de llamar a alguno de sus familiares pero su celular estaba sin batería.
Como pudo buscó una linterna, con la que pretendía hacer señales a quienes estuvieran cerca de la nave e incluso abrió una de las puertas de emergencia pero nop pudo bajar, porque se encontraba a unos 20 metros del suelo.
«Después de esto temo dormir»
En el relato de la amiga que se volvió viral, la mujer relató los dramáticos minutos que pasó tratando de salir del avión. «Busco frenéticamente una cuerda para poder bajarme a un lugar seguro (el asiento de las azafatas está justo al lado de la puerta que abrí), pero el cinturón de seguridad es demasiado corto para colgar desde atrás hasta mis señales de socorro».
Como pudo Tiffani logró llamar la atención de uno de los funcionarios del aeropuerto que conducen los carros de equipaje, quien finalmente le acercó una escalera para que bajara.
Tras el incidente la mujer fue recibida por uno de los representantes de la aerolínea quien le ofreció transporte y alojamiento, pero ella sólo quería regresar a su casa.
Uno de los portavoz de la compañía, que se encuentra bajo investigación por el hecho, detalló que «todavía estamos revisando este asunto, así que no tengo más detalles para compartir».
Tiffani asegura que tras el incidente ha experimentado insomnio y ataques de ansiedad. «No he dormido mucho desde los terrores nocturnos recurrentes y me despierto ansiosa y temo que estoy sola encerrada en un lugar oscuro».