Un menor de sólo 12 años falleció en el incendio que consumió su casa en Kentucky cuando intentó rescatar a Pugley, su querida mascota.
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Cuando las llamas comenzaron a cubrir la vivienda, el niño, su hermana de 5 años y sus padres lograron escapar, sin embargo su perro de raza pug había quedado al interior, señala Daily Mail.
Sin pensarlo dos veces, el pequeño Hunter Ray Denney-Wesley decidió entrar pese al peligro y sus padres no pudieron detenerlo. Lamentablemente nunca más volvió.
“Se fueron para estar juntos con Jesús”, señala una esquela que recuerda al pequeño, en la que se destaca que “siempre tenía una sonrisa”, y que era “un niño cariñoso, generoso, muy inteligente, con un gran sentido del humor y un corazón de oro”.
Según las primeras investigaciones, el fuego se habría iniciado de manera accidental al recalentarse una lámpara que se habría dejado encendida durante la noche.
Amigos de la familia crearon una página en GoFundMe que busca financiar el funeral del niño, que se realizará este jueves, y que también busca financiar una nueva casa.