«Expertos alertan por altos niveles de compuesto potencialmente cancerígeno en el popular berlín chileno». Muchos sufrimos al leer este titular tras un estudio elaborado por el Departamento de Ingeniería Química y Bioprocesos de la Universidad Católica (UC) con respecto a este popular pastel.
Esto luego que el profesor de Ingeniería UC que lideró el trabajo, Franco Pedreschi, detallara que «las mediciones realizadas en laboratorio arrojaron que el berlín contiene 138 microgramos de acrilamida por kilo, a diferencia del küchen y el pie de limón que registraron 83 y 78 microgramos de acrilamida por kilo, comparativamente».
La noticia impactó en redes sociales debido a que el berlín es uno de los productos favoritos de los chilenos, ya sea con crema pastelera, manjar o mermelada.
Ante esto, el científico chileno Gabriel León decidió crear un hilo tuitero para explicar lo que en realidad todos queremos saber: ¿nos dará cáncer si comemos este rico pastel?.
Así que te dejamos todo el relato, resaltando el consejo final: «¿Pueden comer berlines? Sí, pero no se coman 1.000 al día, háganlo de vez en cuando».
