Antes de la crisis medioambiental que hoy atraviesa Quintero, producto de la emanación de gases del proceso de hidrocarburos, el balneario vivía días de gloria y era una de las playas más bellas de la Región de Valparaíso.
La zona ahora está considerada zona de sacrificio ambiental, junto a la comuna de Puchuncaví, debido a la actividad industrial que ahí se registra asociada principalmente a la presencia de Enami, Oxiquim, Chilgener, Enap, la División Ventanas de Codelco y la Termoeléctrica de AES Genera.
¿Qué es una Zona de Sacrificio?
Son aquellos territorios de asentamiento humano devastados ambientalmente por causa del desarrollo industrial.
Esta devastación tiene implicancias directas en el ejercicio pleno de los derechos fundamentales de las personas; derecho a la vida, a la salud, a la educación, al trabajo, a la alimentación, a la vivienda, etc.
En estos territorios el daño ambiental ha significado la situación de vulnerabilidad y empobrecimiento de las comunidades.
Días de gloria
Los orígenes de Quintero se remontan al descubrimiento de Chile en 1536, cuando llega a la bahía la pequeña nave «Santiaguillo», comandada por Alonso de Quintero. La bahía en forma de herradura y protegida de los vientos, presentaba condiciones ideales para el fondaje de embarcaciones y las amplias llanuras adyacentes, el agua fresca, la madera en las cercanías, los abundantes productos del mar y animales de caza, hicieron de Quintero un paso obligado de abastecimiento y resguardo a los piratas y corsarios que asolaban las costas americanas.
El primer corsario en resguardarse en la bahía fue el inglés Francis Drake en diciembre de 1578, después de haber saqueado y quemado el puerto de Valparaíso.
Según los datos recolectados en el Censo del Instituto Nacional de Estadísticas, la comuna posee una superficie de 148 km2 y una población de 31 923 habitantes. Quintero acoge al 1,38% de la población total de la región.
A través de Twitter, el usuario @RenzoVaccarezza compartió una serie de fotografías que mostraban a la bahía antes de los efectos que ha dejado en la zona la contaminación y la nube tóxica por la que sus habitantes exigen terminar con la zona de sacrificio ambiental.
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