Imposibilitada de por vida para cuidar cualquier animal fue la dura condena que recibió una mujer de 54 años en Inglaterra, acusada de maltrato animal, luego que efectivos policiales encontraran en su casa los restos en descomposición de al menos 176 animales.
Entre los cadáveres habían chanchos, pollos y perros, los que murieron tras ser rescatados por Maxine Cammock. Los funcionarios policiales que descubrieron la terrible situación dieron cuenta que los animales murieron de hambre y sed.
El caso de la mujer quedó al descubierto luego que en octubre de 2017 los chanchos de su granja se escaparan y un grupo de rescatistas los llevara de regreso.
Los efectivos descubrieron las condiciones del lugar y cómo mantenía a los animales por lo que decidieron retenerla. En la oportunidad sólo lograron rescatar 9 perros,
El Tribunal de Magistrados de Peterborough escuchó a la inspectora de la Real Sociedad para la Prevención contra la Crueldad Animal (RSPCA, por su sigla en inglés) Kate Burris, quien detalló que quedó horrorizada por la condición en que vivían algunos animales.
Cammock -según reproduce el Daily Mail– se declaró culpable de cinco delitos contrarios a la Ley de bienestar animal de 2006, y tras un largo juicio se estableció que no podrá cuidar de por vida a otro animal, además de 24 meses de servicio comunitario, un requisito de rehabilitación de 30 días.
«Gracias por preocuparse por los animales»
Tras la condena la inspector Burris de RSPCA agradeció a todos quienes se involucraron en el rescate de los animales.
«Quiero agradecer a todos los que han estado involucrados en este caso, desde el oficial de policía que dio la alarma, de lo contrario la situación de estos animales puede no haber salido a la luz, para aquellos que han rehabilitado y vuelto a poner a los animales supervivientes «.
