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Un impactante final tuvo “Secretos en el jardín”, donde se pudo ver quiénes fueron, finalmente, los tres fusilados por los crímenes de Viña del Mar. Y eso se resolvió rápido, cuando se negó el indulto presidencial a Juan (Néstor Cantillana), Lucho (Roberto Farías) y Quiñones (Edinson Díaz), por lo que se inició su proceso de ejecución.
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Y tras escenas como su última comida, una visita de sus familias y un intento de confesión final de Juan a su esposa (Camila Hirane), en que ella misma no lo dejó decir la verdad, vino la escena donde se les fusila y uno de los condenados, Lucho, debe ser ejecutado con un tiro de gracia al sobrevivir al primer impacto.
Pasan tres años, el plebiscito deja como vencedor al “No”, y a un solitario Carlos Cox (Alejandro Goic) que descansa en un jardín lo visita Francisco O’Ryan (Julio Milostich) y, tras unas pocas palabras, lo ejecuta de un tiro como venganza por el asesinato de su hija. Acto seguido, regresa al vehículo donde lo espera Opazo (Francisco Pérez-Bannen), dando a entender que un lado del bando de “los buenos” prefirió esperar el regreso de la democracia para ajustar cuentas.
¿Y qué pasó con Hernán Jerez (Cristián Campos)? Desapareció, probablemente con Magdalena (Antonia Zegers), y no se supo más de él, transformándose en el gran impune de la teleserie más alabada del año.
