La primera dama, Melania Trump, el vicepresidente, Mike Pence, acompañaron al presidente en la recepción.
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Donald Trump ha recibido en la base aérea de Andrews a los tres estadounidenses que Corea del Norte ha liberado como gesto de buena voluntad.
La liberación tiene lugar ante el inminente encuentro entre Trump y el líder norcoreano, Kim Jong-un. “Fue un gesto agradable de dejarlos viajar antes de la reunión”, dijo Trump. «Realmente pienso que quiere hacer algo y llevar su país al mundo real», agregó.
Respondiendo a las preguntas de los periodistas sobre las conversaciones con su homólogo norcoreano, el presidente de los EE. UU. dijo: «No quiero comentar si he hablado con él o no…Es un gran honor. Pero el verdadero honor será si tenemos una victoria para deshacernos de las armas nucleares».
Mientras, Kim Jong-un, ha dicho que su encuentro con Trump, servirá para «construir un buen futuro».