En un club japonés, las personas que frecuentan van de cabeza, porque tienen algo en común: su calvicie. 30 hombres se han enfrentado en una competencia en la ciudad japonesa de Tsuruta.
A los competidores se les coloca una ventosa en la cabeza y tirando de una cuerda tienen que conseguir quitar la del rival. Después de la competencia acaban con dolor de cabeza e, incluso, con una marca de la ventosa, como regalo para la casa.
Video: Reuters.
Publicidad