Alejandra González invocó la ley anti discriminación contra la alcaldesa Graciela Ortúzar (RN), por los continuos actos de hostigamiento que le impiden ejercer su función. La apoyan ongs a favor de la diversidad sexual y el movimiento Fuerza Pública, que encabeza Andrés Velasco.
Alejandra González, nació hace 45 años como Domingo Felipe González Pino. Desde que tiene uso de razón, dice, su identidad ha sido la de una mujer. Aunque la pepeleta del voto en las elecciones municipales aún tenga su nombre antiguo. En Lampa, “una comuna rural y machista” según ella describe, ha sido elegida tres veces para integrar el Consejo Municipal y además, alcaldesa subrogante en 2012 cuando la actual edil Graciela Ortúzar (RN) dejó el puesto para hacer campaña. Precisamente contra Ortúzar y otros funcionarios municipales va dirigida la demanda por discriminación arbitraria que Alejandra presentó ayer, apoyada por la Ley Antidiscriminación.
A pesar de que su carrera en el servicio público lleva años en la comuna, primero como presidenta de un Centro de Padres, luego al frente del Club Deportivo Manuel Rodriguez , después como coordinadora de un Techo Para Chile en Batuco y finalmente como concejal, donde en 2012 fue elegida com primera mayoría, desempeñar su función no ha sido fácil.
“La alcaldesa le ha pedido a funcionarios que me llamen por mi nombre de hombre. En una sesión de Consejo me pidió que no opinara porque no había dado mi voto para aprobar el presupuesto. El 10 de marzo llegué a mi oficina y estaba cerrada, con el pretexto de que se había estropeado la chapa o que no estaban las llaves. Me ha tratado de maricón pobre” afirma a Publimetro.
Todos estos hechos, que han estado ocurriendo en forma sistemática, según relata, la motivaron a presentar la demanda patrocinada por el abogado José Miguel Burmeister, ex candidato a Concejal por la DC.
Alejandra fue elegida como candidata independiente en un cupo PS, pero en esta instancia también la apoya el movimiento Fuerza Pública que preside Sebastián Iglesias-Sichel y que la acompañó a presentar el escrito. Alejandra se definió su identidad femenina desde los 13 años. Pero hasta ahora, no ha tomado hormonas para verse más femenina y tampoco piensa en someterse a un cambio de sexo, por falta de recursos. “Espero que la justicia sancione este caso de transfobia y la vulneración en mi derecho a ser concejala, cargo para el que fui elegida”