La noche del sábado, una familia llegaba a su casa de San Bernardo, desde un bautizo, cuando el destino la cruzó entre una ráfaga de disparos entre balas rivales, impactos que alcanzaron a dos hijos de la familia.
Los hermanos de 15 y 9 años, recibieron un impacto de bala en el cráneo, lo que los mantuvo con riesgo vital. Esto hasta hoy, que la propia Municipalidad de San Bernardo, confirmó el fallecimiento de Bastián Pino Flores (15).
El adolescente se mantenía internado en el Hospital Barros Luco, mientras que su hermano Tomás, permanece en la UCI del Hospital Josefina Martínez.
El lunes pasado, el padre del niño relató a los medios que llegaban a la casa luego de un bautizo, cuando se encontraron con el fuego cruzado, y vieron a sus hijos inconscientes al interior del vehículo.