Ya son dos los proyectos de reforma constitucional que se han ingresado al Congreso para establecer la posibilidad de renuncia de convencionales constituyentes. Todo, tras el escándalo que generó la mentira de Rodrigo Rojas Vade y la inexistencia de causales legales para que pueda hacer efectiva su intención de renuncia.
PUBLICIDAD
El primero proyecto fue el ingresado por el diputado Andrés Longton, y propone que parlamentarios y constituyentes puedan renunciar por «razones personales», pero hoy se sumó un segundo que genera mayor interés, pues también establece mecanismos de reemplazo y tiene apoyos transversales.
Se trata de una moción que suscribieron la presidenta del Senado, Ximena Rincón (DC), y los senadores Carlos Bianchi (IND), Francisco Huenchumilla (DC), Carlos Montes (PS) y David Sandoval (UDI); y donde se amplían las razones de renuncias al incorporar como causal el que un convención cometiera «hechos graves que afecten severamente su desempeño o pongan en riesgo la legitimidad de la labor de la Convención». Debiendo actuar como calificador el Tribunal Calificador de Elecciones.
Asimismo, el texto indica que de producirse una vacante en cargos de convencionales que postularon en listas conformadas sólo por independientes, el reemplazante será la persona del mismo sexo que sigue en votación al convencional que deja la vacante.
De no existir candidatos del mismo sexo, se agrega, se proveerá la vacante con la candidatura con mayor votación después del convencional electo. Y si hubiere candidatos con igual votación, se decidirá entre
ellos por medio de sorteo.
«Quienes firmamos este proyecto esperamos tener un trámite rápido para así dar garantías para resolver el problema que enfrenta uno de los integrantes de la Convención», dijo al respecto el senador Bianchi.
Y dada la gravedad del asunto, el Gobierno también se mostró a favor. De hecho, como indicó el ministro de Justicia, Hernán Larraín, hasta podrían apoyarlo.
PUBLICIDAD
Si bien fue enfático en sostener que el cargo de constituyente, al igual que el de diputado y senador, es irrenunciable, cree que se necesitan excepciones: «Si hay situaciones de extrema gravedad, hay que abrir una válvula de escape, porque si no, el sistema a veces genera explosión. Eso es lo que hay que cuidar y cautelar, y en este caso me parece a mí que una reforma constitucional sería el camino más adecuado».
De todas maneras, entre los constituyentes el asunto aún genera dudas. Por ejemplo, Pedro Muñoz (D24 / PS) pidió cautela: «Valoro el ánimo de colaboración del Parlamento, pero le pido que seamos cuidadosos y no abrir las causales ante cualquier evento, porque lo que está en juego es muy importante».
En los mismos términos, Benito Baranda (D12 / INN) hizo presente que el asunto se debe tratar con precaución «porque las personas no se pueden reemplazar con tanta facilidad, especialmente cuando se construye un texto constitucional (…) tiene que haber una reforma constitucional, pero hay que ver detenidamente las razones».