Edificio Corona tuvo la noche de este lunes 9 su último capítulo. Uno de los desenlaces más esperados era la trama de Germán (Mario Horton), Javiera (María Gracia Omegna) y Pablo (Nicolás Oyarzún). No fue tan dramático, porque no hubo muertos, pero Javiera logró librarse del matratador Germán, acción de Carabineros mediante.
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Como lo contó al final Carlos González, el conserje, que manejaba todo lo que pasaba en el Edificio Corona, Germán se quedó en el edificio, pero sin ninguna posibilidad de acercarse a Javiera, porque tenía una orden de alejamiento. “Ella puso una pastelería con don Pablo. Ella hace las tortas y él hace los repartos”, contó el personaje de Fernando Godoy, que lo sabía todo.
La pastelería se llamaba “Dulzura” y podría atender a ocho personas en el local, debido a las restricciones del covid, del coronavirus.
Y en cuanto a González, él encontró el amor con Esmeralda (Magdalena Müller). Lo que partió como un anillo de pololeo acabó como un anillo de compromiso, para casarse. La penúltima escena de Edificio Corona fue con ambos vestidos para la boda, besándose arriba del ascensor. De esta forma, González pasaba a tener un lazo con su jefe, el administrador Sergio Correa (Francisco Melo).
Al final a Felipe (Simón Beltrán), su padre Pablo y Javiera le cuentan que va a tener un hermano. O un “hermanite”, como le dicen antes de sellar su amor con un beso, que marcó el final de Edificio Corona.
