Un caso realmente insólito ocurrió en Punta Arenas, donde un hombre denunció haber sido víctima de una estafa, cuando solicitó servicios sexuales.
El encuentro contratado por el sujeto, se agendó por $50 mil, pero finalmente decidió no presentarse porque encontró el servicio “muy caro”, se lee en el documento, al que tuvo acceso El Pingüino.
El asunto estaba casi olvidado hasta que, días después, recibió el mensaje de un número desconocido por WhatsApp. Se trataba de la trabajadora que dejó plantada. Le dijo que había perdido su trabajo por su ausencia a la cita y le exigió que le pagase las horas de trabajo que perdió.
Sin embargo, el hombre decidió confesar esta situación a su esposa, luego de que le exigieran el pago de 1,3 millones de pesos a cambio de no publicar la historia en redes sociales.
El querellante –ya acogida a trámite por el Juzgado de Garantía de Punta Arenas– acusa haber sido víctima de estafa. En la acción legal se solicita que se despache una orden de investigar a la PDI para determinar responsabilidades sobre el hecho.