El convencional constituyente Agustín Squella (PL), se refirió a la polémica postura de algunos constituyentes de Chile Vamos quienes plantearon la posibilidad de buscar que la Corte Suprema se refiera a la decisión de aumentar los vicepresidentes en la instancia a una mesa directiva de nueve personas, con posibilidad de cupos reservados.
En tal posición, el profesor de derecho advirtió de un probable colapso al que podría llegar el organismo de mediar esa posición.
«Hacer esas reclamaciones por cosas que son de resorte nuestro en parte, y en parte del Gobierno, puede crear un clima interno en la convención de innecesaria crispación, y a la vez, proyectar a la ciudadanía una imagen deficiente de la convención», sostuvo, agregando que «este organismo tiene una altísima aprobación ciudadana y eso es importante para nuestro trabajo. Pero esa aprobación va a depender de que mejoremos el trabajo, pero a la vez eso depende de que los responsables de propiciar las condiciones de ese trabajo, lleven a cabo sus deberes de la mejor forma».
De esta manera, Squella matizó las declaraciones que dio en una entrevista a radio Pauta, esta mañana, donde señaló sentirse «cada vez más solo» al interior del organismo constituyente, atendiendo a las polémicas que se han registrado en la primera sesión.
«La sesión de ayer contó con un muy alto grado de improvisación, desorden, agudizado por las evidentes deficientes condiciones de funcionamiento de la Convención», afirmó, agregando su disconformidad con la ampliación de la mesa.
«Ampliar la mesa podría entenderse que estábamos pasando por alto una de las reglas previas. Si así se entendiera podría ser utilizada como precedente para modificar otra regla previa», sostuvo el académico.
En ese plano, además, acusó una similitud del organismo, en sus primeros días, con la Cámara de Diputados.
«Comprendo que haya grupos por afinidades políticas, pero el riesgo que estamos corriendo es que de los grupos pasemos a las facciones, y de las facciones a las presiones sobre la mesa o los demás», sostuvo. «Nos estamos pareciendo demasiado a la Cámara de Diputados. Lo único que faltaría es que a estos grupos le llamáramos bancadas y estaríamos haciendo otra vez lo que el país está cansado».