La OMS advirtió antes de la pandemia de coronavirus que la obesidad en el mundo alcanza proporciones epidémicas, matando como mínimo a 2,8 millones de personas por año.
La entidad llegó a calificar a la obesidad infantil como uno de los problemas de salud pública más graves del siglo XXI. Se multiplicó por 10 en los últimos 40 años.
En 2021, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, convocó a una Cumbre sobre los Sistemas Alimentarios.
60% de niños con sobrepeso
En Chile, según cifras de la Federación Mundial de Obesidad (World Obesity Federation), más de 10 millones de personas sufren de obesidad o sobrepeso.
La OMS la define como una enfermedad crónica y multifactorial. Asimismo, el 60% de los niños de quinto básico presenta hoy sobrepeso u obesidad.
Por ello, Pacto Global organizó un panel en la Cumbre de los sistemas alimentarios en nuestro país.
“Debemos con urgencia hacernos cargo de esta problemática, fomentando el diálogo y el debate entre los actores involucrados, para construir políticas públicas y programas de sensibilización», afirma Margarita Ducci, directora ejecutiva Pacto Global de Naciones Unidas.
Chile es «subcampeón» en clasificación de la OCDE
Chile lidera tristemente la tabla de posiciones, ya que es el segundo país con más sobrepeso y obesidad de la OCDE, con el 74,2% de su población afectada.
El ranking lo encabeza México, con un 75,2% y, en tercer lugar, Estados Unidos, con un 71%.
Según expertos, la probabilidad de sufrir una infección grave por coronavirus se incrementa en 44% en las personas con sobrepeso y se dobla en quienes sufren obesidad.
“En EE.UU. se demostró que el 40% de enfermos hospitalizados eran obesos y si es joven y tiene obesidad, su riesgo se incrementa de manera importante”, confirma el doctor Sebastián Ugarte.
El tema resulta extremadamente complejo de solucionar. El confinamiento obligado genera sedentarismo, mala alimentación, problemas de sueño, eternas horas frente a pantallas, carencia de actividad física y detrimento de la salud mental.