La PDI junto a la Fiscalía Oriente lograron la detención de seis personas, que forman parte de una la banda más peligrosas del último tiempo en el país, que protagonizaron el asalto frustrado en el mall Alto Las Condes, en marzo pasado y que ahora los cabos unen ese delito, ya que hay un arma en común con el asesinato de la pequeña Tamara Moya.
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El prefecto inspector Jorge Sánchez, jefe nacional contra robos y focos criminales de la PDI, indicó que a esta banda se le imputan 15 delitos, todos violentos. «Dentro de las incautaciones tenemos armas de fuego y una en particular (pistola CZ, de 9mm) a la que se realizó peritaje científico y se estableció que tiene incidencia en el crimen de Tamara y en la balacera del Alto Las Condes, donde fue herido en la región craneana uno de nuestros oficiales”.
En tanto, se le consultó al prefecto si era parte de la banda, el menor de edad fallecido hace semanas, a quien se le imputó la participación en la muerte de la pequeña de cinco años en Huechuraba, la respuesta fue positiva.
Al respecto, el fiscal Manuel Guerra indicó que «estamos frente a una organización criminal, sujetos organizados que se distribuyen roles y distribución de las tareas, lo que caracteriza a estas bandas criminales y esta es la más violenta que hemos visto en el último tiempo, planificaban exhaustivamente los delitos, en el caso de la joyería Mosso, estas personas concurrían con anterioridad al lugar del delito, ver lugares de llegada, salida, luego realizaban asaltos de vehículos para ser utilizados en el crimen y luego los abandonaban».
