En prisión preventiva quedó el abogado Ricardo González (55), que fue formalizado por el presunto delito de homicidio calificado de una mujer que sería su socia en un negocio. En un principio, el hombre quedó libre tras la presentación de cargos ante el Juzgado de Garantía de Quilpué. Pero luego la Corte de Apelaciones de Valparaíso decretó la prisión.
De acuerdo con el relato de la fiscalía de Quilpué, González conoció a su presunta víctima, Natalia Véliz, mediante las redes sociales. Así establecieron una relación laboral y empezaron un negocio en común. González le habría sugerido tomar un seguro de vida que beneficiaría a alguna de sus hijas. Según las indagaciones de la fiscalía, en realidad el beneficiario de este documento era él mismo.
Tres años de investigación
La investigación se inició en julio de 2018, tras una denuncia del médico que trató a la víctima en el Hospital de Quilpué: existían indicios de posible ingesta de alcohol metílico. La mujer fue hospitalizada el 30 de julio de ese año. Falleció días después. “Conforme a los síntomas y relato de familiares, se apuntaba a un envenenamiento por alcohol metílico”, dijo el fiscal Hernán Silva en la formalización.
Este alcohol desaparece a las 12 a 24 horas del organismo. En el cerebro genera un rápido deterioro y la víctima empieza a tener síntomas como pérdida de visión. De acuerdo a lo informado por la Fiscalía, se creó un equipo multidiciplinario para la causa, que trabajó con la BIPE de la PDI en la última etapa. Eso permitió reunir todas las pruebas por indicios.
González fue detenido en la comuna de Concón. Hasta ahora se ha establecido que la víctima tenía al menos tres seguros donde figuraba como asegurada y el abogado como el beneficiario. González tiene una condena del 2000 en el Juzgado del Crimen de Los Andes por un homicidio de 1997: la víctima también tenía un seguro a su favor, pero que no se pudo cobrar por falta de pagos.
Más casos
La fiscalía también informó que en 2004 estuvo investigado en una causa donde la víctima, otra mujer, falleció por arma de fuego pero no se acreditó su participación. Y en 2012 existe una denuncia por homicidio, donde la víctima tenía un seguro, cuyos beneficiarios eran cercanos al imputado.
“Se ha podido establecer un patrón de conducta, el hilo conductor o patrón común que hay en todos los hechos en que se ha involucrado el imputado. Es la existencia de seguros de vida de las víctimas, cuyo beneficiario era él mismo o personas de su círculo cercano. Y se ha establecido que el delito que se le imputa acá en Quilpué lo fue por medio de veneno, con alevosía y con premeditación, tres circunstancias modificantes que transforman el homicidio en homicidio calificado”, explicó el fiscal Silva.