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De “segundón” y “candado chino”, a dar el golpe en la Cadem: los agitados días de Pamelas Jiles

Podrá generar más rechazo que aplausos, pero lo cierto es que el avasallador estilo de Pamela Jiles le ha traído réditos en las encuestas y así lo reveló la última Cadem.

Más allá de los cuestionamientos y críticas que pueda recibir la encuesta Cadem, lo cierto, es que su última Encuesta Plaza Pública -divulgada este domingo- ubicó a la diputada Pamela Jiles (PH) como la candidata con más intención de voto con un 20%, por delante de Joaquín Lavín (14%), Daniel Jadue (11%) y Evelyn Matthei (7%).

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Y el efecto no es casual: en los últimos días Pamela Jiles ha iniciado una fuerte arremetida pública en medio del inevitable avance de la discusión por el tercer retiro del 10% de los fondos de la AFP. Y no es para menos, si se considera que fue la propia parlamentaria quien llevó la voz cantante del primer retiro, cuya autoría corrió por cuenta de Karim Bianchi.

En medio del tenso escenario político que vive el Congreso desde el estallido social, Jiles no ha perdido el tiempo en mostrar las garras de su desafiante y cuestionado perfil: prueba de ello han sido sus dos últimas polémicas, donde en menos de una semana, trató de “segundón” al subsecretario de Hacienda, Máximo Pávez, y le salió al cruce al diputado Diego Schalper (RN) calificándolo de «candado chino».

«Segundón»

El capítulo comienza así: el pasado 1 de abril en plena Comisión de Constitución de la Cámara de Diputadas y Diputados, donde se aprobó en general el proyecto de reforma constitucional que establece un «impuesto a los súper ricos», la diputada trató de segundón al subsecretario de Hacienda, Máximo Pavez.

«Pido que por favor, el subsecretario no sea habilitado para participar en esta comisión, puesto que no está presente el ministro. Si el Gobierno se quiere ir en la dura, por lo menos que venga a dar la cara el ministro (Segpres) Ossa, a decirle él con su cara a todo el país, no mandar a un segundón, a decirle a la ciudadanía que se opone a un impuesto a los super ricos».

«Pido mi derecho a que se calle Máximo Pavez, que deje de hablar porque no tiene derecho a hacerlo, yo no lo habilito», continuó la parlamentaria.

Los dichos de la periodista generaron una ola de críticas desde el oficialismo a tal punto que un grupo de diputados llevó Jiles a comisión de Ética por sus dichos contra Pavez. Después, la propia apuntada defendió sus términos: «Según la RAE (Max Pavez) es un segundón».

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«Me hacen un enorme favor justo cuando necesito subir dos puntos más en las encuestas, vienen con esta absurda acusación que lo que tiene en realidad, en el fondo, es el intento del desgobierno de castigarme porque ‘la abuela’ es el rostro del tercer retiro”, declaró.

«Candado chino»

Días después, el 6 de abril, vino la otra gran arremetida de Jiles. Esta vez, el apuntado fue el diputado de RN, Diego Schalper, cuestionó que la diputada votara por establecer una franja electoral para la elección de gobernadores asegurando la existencia de un conflicto de interés: pues su esposo, Pablo Maltés es candidato a gobernador.

Jiles no demoró nada en lanzarse contra Schalper: «Nanai diputado ‘candado chino’ Schalper. El diputado acaba de señalar en el hemiciclo que yo debería inhabilitarme en relación al proyecto que estamos votando sobre la franja. Supongo que haciendo referencia a que ‘El Abuelo’, Pablo Maltés, es candidato a gobernador por la Región Metropolitana. Cuestión que él no dice porque no es hombrecito», acusó la parlamentaria.

El monólogo de Jiles continuó: «Diputado ‘candado chino’ Schalper. Diputado ‘candado chino’ Schalper, ¿me escucha? Diputado ‘candado chino’ Schalper, imprímalo: Abuelo gobernador, abuelo gobernador. Insolente, la ‘Abuela’ no se inhabilita».

Pamela Jiles, comparada con Trump

Inmediatamente, la «Abuela» sumó críticas desde todos los sectores. Incluso, agrupaciones feministas como la Red Docente Feminista rechazó los dichos de la parlamentaria tildándolos de «machistas» y «sexistas».

Los candidatos presidenciables, Gabriel Boric y Heraldo Muñoz también se lanzaron contra la periodista: «Lo mínimo exigible para todo quien aspira a ser Presidente/a de la República es respetar al resto», apuntó la carta del Frente Amplio, mientras que el representate del PPD aseguró que «los apodos denigrantes y ofensas personales no pueden tener lugar entre quienes pretenden la primera magistratura«.

El pasado domingo, el periodista Daniel Matamala también criticó los últimos enfrentamientos de Jiles en el Congreso a través de una columna publicada en La Tercera, donde comparó su estilo con el del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump.

«La estrategia es un calco de Trump: humillar en vez de argumentar, y usar la performance como reemplazo del debate sobre políticas públicas. Jiles reduce al mínimo las entrevistas, el contacto cara a cara con sus votantes, y cualquier instancia donde deba rendir cuentas, explicar o matizar. Lo suyo es la frase terminante, el sobrenombre hiriente. Su manejo del lenguaje es muy superior al primitivo Trump, pero la estrategia es la misma», publicó el columnista.

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