Tras aproximadamente ocho meses sin poder operar durante la temporada 2020 a raíz del impacto del covid-19, la industria del turismo en el Valle del Elqui vive días de una particular reactivación. Por un lado está el interés de atraer visitantes, pero por otra parte el deseo de una comunidad local que no quiere sufrir el más severo flagelo de la pandemia. A ese escenario llegó Publimetro junto a #ViveChile.
A través de la campaña #ViveChile, que busca levantar el turismo nacional en medio de la pandemia del coronavirus, pudimos conocer algunas experiencias de una comunidad local que a lo largo de su historia ha consolidado la actividad turística como uno de sus principales sustentos.
¿Cómo vivir del turismo en plena pandemia? Los actores del turismo local en el Valle del Elqui recalcan un asunto clave: el largo cierre de ocho meses que enfrentaron en 2020. Aquel duro receso permitió resguardar a la comunidad en los momentos más duros del covid-19, como también preparar una estrategia para reabrir en verano.
«Creo que fue clave el haber tomado una dura decisión en marzo del año pasado, al decir ‘cerremos nuestros negocios sin pataleo’. Nos enfocamos en trabajar y aguantar con la visión de que se estaba haciendo lo correcto y había que apoyar. Nos pusimos todos en la misma línea», apunta Juan Carlos Aoun, dueño del Refugio el Molle y confundador de la cervecería Ruta 41.
«En ese tiempo estuvimos trabajando de la mano con la municipalidad de Vicuña y con la comunidad de empresarios en poder desarrollar una estrategia para poder hacer una apertura, cuando fuera la oportunidad, de manera segura, respetando primero a la comunidad, de la que formamos parte nosotros mismos, porque más allá de que somos empresarios, también somos residentes de esta comuna. Fue un trabajo muy de la mano en implementación de protocolos, en comunicación, en entender de qué se trataba esta pandemia», agrega.
En Pisco Elqui, en la comuna de Paihuano, Bárbara Tamblay, dueña de Turismo Migrantes, plantea algo similar al expresar que «la industria turística quiere seguir trabajando, pero no a costa de la población local. En eso existe absoluta tranquilidad».
En ese sentido, enfatiza que «como industria turística, sin tener casos y sin estar declarados en cuarentena, voluntariamente estuvimos de acuerdo con cerrar radicalmente la comuna el año pasado, a costa de un lucro cesante durante ocho meses. Estuvimos todos de acuerdo, porque se puso al territorio y a la población por sobre nuestros propios negocios y ese espíritu se mantiene hasta el día de hoy».
Condiciones naturales
En medio de un escenario de pandemia, tanto en Paihuano como en Vicuña destacan las condiciones naturales que ofrece el Valle del Elqui para poder desarrollar la actividad turística y mantener estrictos cuidados por el coronavirus.
«Somos una comuna de 4.500 habitantes, lo que es poco. La densidad poblacional acá es bajísima y estamos en una zona rural. Por ejemplo, en nuestra astroexperiencia que se desarrolla al aire libre, marcar un metro y medio de distancia entre los pasajeros es algo que podíamos hacer incluso antes de la pandemia», expone Bárbara Tamblay.
«Acá no hay departamentos, no hay hoteles de gran densidad, por eso este destino al aire libre resulta seguro, pero lo decimos con bastante cautela, porque tampoco queremos promoverlo tanto, porque justamente algo que conversaremos internamente es que no hiciéramos una campaña de promoción agresiva, en el sentido que esa seguridad que estamos gozando es frágil», complementa.
Por su parte Juan Carlos Aoun sostiene que «nuestro valle y esta comuna (Vicuña) en general tiene condiciones naturales, porque territorialmente muy amplia, hay distanciamiento, no se dan grandes aglomeraciones. Las empresas de acá en general son pequeñas, pero cuentan con grandes espacios en la naturaleza y esas condiciones ayudan a la prevención del contagio. Creo que eso ha sido clave para que comunas como Vicuña hayan sido de las pocas sin cuarentena en todo el país».
El compromiso del turista
Más allá de todas las medidas de parte de la comunidad local y los empresarios, un asunto fundamental es el comportamiento del turista. En ese sentido Daniela González, administradora de Elqui Domos, destaca el compromiso que han mostrado los visitantes.
«Hemos estado con muy buena ocupación, han sido fructíferos estos meses desde la reapertura que fue a mediados noviembre. La gente viene con bastante cuidado, cumpliendo todas las medidas, recibiendo de buena manera la información y los protocolos cuando llegan. No hemos tenido problemas, los turistas han sido obedientes, ha habido esa disposición de cuidarnos entre todos«, comenta.
En base a ese buen comportamiento por parte de los turistas y el buen flujo que han experimentado tras la reapertura, González cuenta que «estamos proyectando que puede venir una buena temporada. Sabemos que en Chile la gente necesita salir a distraerse en medio de todo lo que está pasando y el Valle del Elqui ofrece varias cosas como el turismo wellness (de bienestar) o el turismo aventura, que se pueden desarrollar al aire libre y sin aglomeraciones. La gente busca desconexión, naturaleza y no estar entre cuatro paredes. Eso se puede encontrar en nuestro valle».