El puye es un pez bastante tradicional en el sur del país. Puede encontrarse en ríos y lagos, pero año a año es más difícil de encontrar. Hace 50 años se extraía de manera abundante en la cuenca del río Valdivia. Su nombre «puye» significa pequeño pez en mapudungún.
En Nueva Zelanda se le conoce como «Common Galaxia» y hay una millonaria industria relacionada con su consumo. Este pececillo se consume cuando es pequeño y en grandes cantidades. Internacionalmente se le describe como una pequeña anguila y es bastante caro.
Desde la Universidad Austral quieren rescatar a la especie y aumentar nuevamente su presencia. La investigación está a cargo del Dr. Cristian Correa del Instituto de Conservación, Biodiversidad y Territorio de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la U. Austral de Chile, gracias al fondo de investigación del Centro de Humedales Río Cruces. “Hoy son muy pocos quienes lo pescan porque cada vez les cuesta más encontrarlo”, señala Correa.
Importante en el sur
El por qué se produjo la disminución del recurso es uno de los objetivos del proyecto que lidera el académico Cristián Correa de la Universidad Austral de Chile gracias al financiamiento del Centro de Humedales Río Cruces (CEHUM).
“La pesquería de puye fue muy importante hace algunas décadas, donde emplearon a más de 100 personas en la región con ingresos sustanciales en Isla del Rey y Valdivia, pero hoy día la pesca del puye está muy disminuida casi al punto de su desaparición. Y la percepción de los pescadores es que el recurso ha disminuido y nosotros queremos saber por qué”, indicó el Dr. Correa.
Un pez pequeño
En la adultez el puye llega a los 15 cm. como máximo. Pero como señalábamos, su consumo se concentra en su etapa de larva. En esa etapa su aspecto es como el de un fideo de arroz transparente. Se prepara entero, salteado, apanado, en tortillas o en caldillo.
¿Qué ha hecho que este pequeño vaya desapareciendo? Por ahora una razón de la merma de la población es la pérdida del hábitat reproductivo, explica Correa. “En Valdivia, junto a la costanera o el área industrial, prácticamente no quedan sitios naturales de desove. Cementaron el borde del río, en el centro de la ciudad», continúa el especialista. «Todo ese proceso de eliminación de ribera reemplazó el hábitat nativo por uno duro, de pilotes, cemento, fierro y piedra. Casi no existe una vegetación densa donde puedan desovar”, concluyó.
¿Cómo era el ciclo antiguamente?
Estos peces buscan zonas inundadas con vegetación densa para garantizar un ambiente ideal para el desarrollo de los huevos. Durante las 4 semanas que tarda el desarrollo embrionario, los huevos permanecen expuestos al aire, pero húmedos y protegidos por la vegetación.
Al cabo de este período y durante la siguiente marea viva, los embriones son nuevamente inundados y las larvas eclosionan rápidamente de los huevos, derivando hacia el mar. Cuando alcanzan un tamaño de 4 a 5 centímetros retornan en la forma de grandes y densos cardúmenes a los sectores costeros y luego suben por el río. Es en este momento, cuando se practica la pesca tradicional del puye, con una fina red rígida. O así se hacía.