Cuando los dueños de las grandes tecnológicas son los que dominan los rankings de millonarios en la actualidad, a veces ocurren excepciones y debido a no una industria cualquiera. Y es que según la revista Forbes y la agencia Bloomberg, el lujo ayudó a que Bill Gates perdiera un puesto en el ranking de los más ricos del mundo.
Bernard Arnault, presidente del grupo de productos de lujo Lvmh (Moët Hennessy-Louis Vuitton), se alzó como la segunda fortuna mundial, por sobre el dueño e Microsoft y por detrás del dueño de Amazon, Jeff Bezos.
Según la publicación de la revista estadounidense, el francés de 70 años posee US$105.100 millones, solo un poco más que los 103.700 millones de Gates, gracias a que es dueño de la mitad de la firma antes mencionada a través de un holding familiar, pero además posee una participación de 97% en la casa de modas Christian Dior.
Arnault, que prometió entregar US$650 millones para reconstrucción de la devastada Notre Dame de París, se coló en el podio de los más multimillonarios del planeta, gracias a que su billetera acumuló la nada despreciable suma de US$39 mil millones